Otra vez el futuro rindió honores desde la pista en Memorial Blas Beato

Editado por Raúl Rodríguez
2019-04-14 11:48:27

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Ana Fidelia premiando a ganadores. Foto: Calixto N. LLanes

La Habana, 14 abr (JIT) Disfrutar de parte del relevo de la velocidad en la capital fue el mejor saldo que volvió a dejar el Memorial Blas Beato, convocado este sábado en el emblemático estadio Pedro Marrero como homenaje a uno de los principales formadores del atletismo cubano.

Organizada por séptima ocasión consecutiva, la cita mantuvo su arraigo a la búsqueda de talentos y se erigió una vez más en una mañana de encuentros, no solo para los que comienzan en la pista, sino también para que compartieran allí estrellas como Ana Fidelia Quirós y Javier Sotomayor.

«Blas fue un gran padre, me ayudó no solo en formarme como corredora, también como persona, y esta es una manera de retribuir todo lo que hizo», dijo a JIT la doble medallista olímpica, quien fue su alumna insignia junto a Aurelia “Yeya” Pentón.

Precisamente es Ana Fidelia la principal organizadora de este festival que cada año se adueña del estadio capitalino con las carreras desde 400 hasta 1000 metros, con sus participantes divididos en categorías de edades.

«Muchos de los que han competido aquí en años anteriores luego han pasado a las filas de las Eides y las preselecciones nacionales, y ese es uno de los objetivos que buscamos», afirmó la doble campeona mundial, eterna entusiasta en temas de este tipo.

«Este es el mejor homenaje que cada año se le puede ofrecer a mi padre», aseguró Inés María Beato, hija de uno de los pilares en los que se sustentan los resultados de la velocidad en la Isla.

«Desde donde quiera que él nos siga yo sé que se siente orgulloso de lo que vivimos en días como estos», comentó sin poder disimular el brillo de una mirada que “habló” incluso más que sus palabras.

Así volvió a ser la jornada del Memorial Blas Beato, entre recuerdos e intentos por llegar primero a la meta y tener el privilegio de recibir el premio de manos de una de las mujeres insignias del deporte cubano.

Por eso tampoco faltaron las fotos junto a la bien llamada Tormenta del Caribe, esa misma Ana Fidelia fiel al atletismo que le dio varios de los mejores momentos de su vida.



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