La Habana, 1 feb (RHC).- El cubano Juan Miguel Echevarría, una de las estrellas del atletismo mundial, ha vuelto a los entrenamientos y espera ser readmitido en la selección de la isla, siete meses después de haber solicitado su baja.
“Lleva alrededor de una semana entrenando conmigo, pero hay que esperar, su regreso oficial debe autorizarlo la Comisión Nacional”, dijo a Radio Habana Cuba (www.radiohc.cu) Juan Gualberto Nápoles, quien está adiestrando al laureado saltador de longitud de 24 años en el Estadio Panamericano del este de La Habana.
“Lo veo más alto, ha crecido. Mantiene sus habilidades, aunque está empezando es un atleta que coge la forma deportiva rápido”, agregó Nápoles, quien ya entrenó a Echevarría en su época de juvenil y a otros saltadores como el bronce olímpico Maikel Massó y los medallistas mundiales juveniles Léster Lescay, Maikel Vidal, Irisdaimi Herrera y su hijo, el triplista Cristian Nápoles.
El adiestrador recordó que Echevarría, subcampeón olímpico en Tokio-2020 y monarca mundial bajo techo en Birmingham-2018, solicitó su baja el pasado 2022 -alegó problemas personales- y ahora debe pasar por un proceso legal (para su readmisión), como pasaron otros que han vuelto y también habían solicitaron su salida” del equipo nacional.
En ese caso están, entre otros, el propio Juan Gualberto Nápoles, su hijo Cristian, cuarto lugar mundial en triple salto, y la monarca mundial y plata olímpica en pértiga, Yarisley Silva, quienes regresaron a la selección cubana de atletismo tras algún tiempo fuera por su propia voluntad. Silva en estos momentos se alejó otra vez de las pistas pues se encuentra embarazada.
Aunque la vuelta de Echevarría parece cuestión de tiempo, debe esperar el autorizo de la Comisión Nacional de Atletismo, cuyo principal directivo, el recién nombrado Comisionado Nacional en sustitución de Yipsi Moreno, Rolando Charró, se encuentra en Europa junto al grupo de atletas de la isla que realiza la gira de invierno.
De concretarse el regreso de Echevarría, el atletismo cubano se fortalecería con vista a las principales competencias del año: los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador y los Panamericanos de Santiago de Chile.
Considerado una de las estrellas del atletismo en los últimos años, el nativo de Camagüey exhibe en su expediente el subtítulo olímpico en Tokio-2020, el oro mundial bajo techo en Birmingham-2018 y el bronce en el mundial al aire libre de Doha-2019.
Además, ostenta una marca personal de 8.68 m lograda en junio de 2018, que lo convirtió en el saltador de longitud que más lejos ha llegado con menos de 20 años y lo dejó a solo 3 centímetros del récord cubano, en poder desde 1995 del fenomenal Iván Pedroso (8.71)
Por su talento y potencialidades (1.86 m y 72 kg), la Federación Internacional y expertos lo señalaban como el primer humano con opciones reales de superar la barrera de los 9 metros, marca que rozó con viento a favor, al saltar 8.92 en marzo de 2019 en una competencia en La Habana.