Photo: Fédération Internationale de Judo.
París, 26 jul (JIT).- A Idalys Ortiz le sobran motivos para sonreír tan desenfadadamente. La vida la premió con un peculiar talento para brillar dentro y fuera de los tatamis, y aunque los Juegos Olímpicos a punto de comenzar oficialmente en esta ciudad marcarán su última incursión en estas lides, asegura que no tiene espacio para la tristeza.
«Muy feliz de estar nuevamente en unos juegos olímpicos, los quintos para mí», comenta a JIT orgullosa, pero tan modesta que prefiere no mencionar que también le abren las puertas a igual cifra de medallas bajo los cinco aros.
Inició su ruta a este nivel ganando la presea de bronce en la división de +78 kilogramos de la edición de Pekín 2008. Cuatro años después tocó la máxima gloria en Londres 2012, y la cosecha se completa con los subtítulos conseguidos en las versiones de Río de Janeiro 2016 y Tokio 2020.
En la Arena del Campo de Marte puede extender su exitosa trayectoria y para ello tendrá que comenzar sometiendo a la india Tulika Maan, en su primer combate pactado el 2 de agosto. Para entonces, muchas miradas estarán sobre la digna abanderada de la delegación cubana.
«Es un gran placer ser la abanderada y acompañar a dos grandes de Cuba. Mijaín López, que no estará en el acto de inauguración, pero recibió la bandera en La Habana, y a Julio César la Cruz, con quien compartiré en la inauguración», confesó la artemiseña, también medallista mundial en ocho ocasiones y cuatro veces campeona en juegos panamericanos.
«Nosotros somos líderes del deporte en Cuba y las palabras no alcanzan para describir cómo se siente lo que estamos viviendo en estos momentos», reafirmó con otra amplia sonrisa, a su llegada este jueves a la villa olímpica.
Idalys y los otros tres representantes de la Isla en la justa de judo completaron durante los meses previos una intensa etapa de preparación, que incluyó participaciones en torneos internacionales, lo que les permite llegar en óptima forma al gran reto que representa competir en la cita parisina.
«Lógicamente el objetivo es uno. Todos hemos venido trabajando con una sola meta, estar nuevamente en el podio de una cita olímpica», ratifica a modo de despedida, consciente de que gane o pierda cuenta con un espacio seguro entre los grandes del deporte de todos los tiempos.
Maylín del Toro (63 kg), Iván Silva (90) y Andy Granda (más de 100) completan el grupo de judocas cubanos que buscarán mantener la tradición como uno de los deportes que más ha aportado al medallero de la isla en lides olímpicas.