Taekwondo
La Habana, 24 ene (JIT).- El destacado desempeño del taekwondo de Cuba en el cuatrienio que culminó con los Juegos Olímpicos de París 2024, marcó el jueves los festejos por los 38 años de la práctica de esta disciplina en la Isla.
En la Escuela Ramal del Inder reinó el orgullo y el compromiso de quienes fueron condecorados por la Unión Panamericana de Taekwondo (Patu) con el Premio a la Excelencia Deportiva.
El séptimo Dan Iván Fernández, titular de la Federación Cubana de Taekwondo (FCT), destacó que estos logros son fruto de la pericia, la inteligencia deportiva, la gestión, las alianzas estratégicas, la pasión y la entrega.
«Todo se construyó sin tecnología, con una ruta crítica que no pudo ser mejor debido al feroz bloqueo económico estadounidense, el éxodo de entrenadores, principalmente de base, y el abandono de atletas en delegaciones...», citó.
A pesar de estos desafíos, se realizaron tres ediciones del Open de La Habana, que ofrece puntos para el ranking mundial. Además, dos cubanos fueron elegidos para integrar la Junta Directiva de la Patu. También se logró presencia en los comités de ética, desarrollo, atleta y mujer, y cinco árbitros obtuvieron la categoría de internacionales.
Durante este período, Cuba escaló al podio por países en el campeonato panamericano del deporte y presentó a la mejor atleta femenina a nivel continental, Arlettys de la Caridad Acosta Herrera, quien además regresó al contexto olímpico.
Ella, su entrenador Arlen Manuel González y otros destacados, como el doble medallista de bronce bajo los cinco aros Rafael Alba, recibieron reconocimientos.
Entre los homenajeados también se destacaron el investigador Dr. C. Roberto Fernández, del Aula de Artes Marciales y Deportes Afines de la Escuela Ramal, y la Dr. C. Mileydi Paz, mejor árbitro internacional.
En el parataekwondo, fueron ponderadas las figuras de Lilisbet Rodríguez y Michel Ernesto Suárez, y en el poomsae Ania Indira Delgado y Darío Enrique Navarro.
El padre de este último, Enrique Navarro, agradeció ser reconocido como el activista más sobresaliente, mientras que Alexander Jorge Nash, de La Habana, fue elegido como el mejor comisionado, con su provincia destacada como la más integral del país.
La especial jornada recordó el altruismo y la entrega del maestro ecuatoriano Fernando Jaramillo, quien introdujo el taekwondo en Cuba en 1987. La actividad, que se convirtió en una gala, fue honrada con la presencia de la leyenda viva del taekwondo, Víctor Cuesta.