Río de Janeiro, 21 dic (RHC) Las 10 medidas anunciadas por el presidente Michel Temer no constituyen un programa de estímulo a la economía, ni serán capaces de impulsar la actividad productiva, señaló este martes el Departamento Intersindical de Estadísticas y Estudios Socieoeconómicos (Dieese).
Del Gobierno se esperaba un conjunto de iniciativas que movilizaran las inversiones, permitieran retomar el consumo interno y otorgaran al Estado el papel de inductor para sacar a la economía de la recesión, recordó la institución, fundada hace más de 60 años, indica Telesur.
El Dieese examinó cada una de las 10 medidas esbozadas la semana pasada por el titular del Ejecutivo, las cuales todavía deberán ser detalladas y transformadas en proyectos de ley y medidas provisorias cuya implementación ocurrirá a lo largo de los próximos dos años.
Refiriéndose a la propuesta de regularización tributaria, la entidad valoró que se trata de una iniciativa importante, pero para saldar deudas las empresas necesitan producir y facturar y los trabajadores tener empleos y salarios, subrayó.
Además de eso, el principal problema de las empresas son las deudas bancarias, un asunto que no es tratado en el conjunto de propuestas esbozadas por Temer, señaló.
Con relación al incentivo inmobiliario, el Dieese advirtió que se trata de una medida polémica que exigirá cuidado, pues 'puede llevar al sistema financiero nacional por caminos críticos no deseados'.
En opinión de especialistas del Departamento Intersindical tampoco la reducción de costos por el uso de las tarjetas de crédito ataca las reales causas de la fuerte caída en el consumo de las familias ni el deterioro de la situación financiera de las empresas, como la desburocratización no resolverá el problema del endeudamiento empresarial.
El Dieese analizó también el fomento del microcrédito productivo, un programa nacional instituido en 2005 y que en cuatro años cuadriplicó el número de clientes y trajo algunas mejoras sociales en determinadas regiones del país, pero que a la vez demostró su poca eficacia para estimular el crecimiento económico.
Con relación al incremento de la competitividad del comercio exterior mediante la aplicación de medidas que mejoren los procesos aduaneros y reduzcan en hasta un 40 por ciento el tiempo para los procedimientos de importación y exportación, dijo que tienen un 'carácter tímido y difuso'.
Esas disposiciones -dijo- serán inefectivas para mejorar la competitividad porque no consideran, entre otras cuestiones, la tendencia cíclica y crónica de la apreciación de las tasas de cambio; la necesidad de perfeccionar el uso de instrumentos de defensa comercial, y la reducción de las barreras tarifarias y no tarifarias a las exportaciones.