La Habana, 17 may (RHC) Uno de los más famosos mercados de La Habana es objeto de una reparación y remodelación capitales para dotar a la ciudad de un nuevo centro comercial.
En una de las zonas más céntricas de La Habana, en una encrucijada de calles que van a la ciudad vieja, al Vedado, a Diez de Octubre y al Cerro, está emplazada una de las plazas comerciales más famosas de la capital cubana: el mercado de Cuatro Caminos, precisa CubaSi.
Ya desde la década de los noventa la gran instalación (que ocupa toda una manzana) había entrado en una etapa de decadencia. Últimamente, por el deteriorado estado contructivo, solo se utilizaba una parte del espacio para la venta de productos agropecuarios. El segundo piso, que antaño ofrecía servicios gastronómicos, estaba cerrado. En el piso inferior se instalaron varias ventas particulares.
Esta situación cambió hace algún tiempo. En 2014, el Grupo de Inversiones Cimex dio a conocer un proyecto para la construcción aquí de un centro comercial de nuevo tipo. Un gran mercado para una gran ciudad.
El edificio tiene indudables valores arquitéctónicos e históricos, por esa la reparación respetará en buena medida las características originales, fundamentalmente de las fachadas (se espera reponer los grandes relojes). Pero serán notables los aires de contemporaneidad.
Para diciembre del próximo año deben concluir las obras, en saludo al aniversario 500 de La Habana.
El Mercado Único de Cuatro Caminos (ese será el nombre) acogerá en su segunda planta a una moderna tienda de artículos para el hogar, una cafetería y algunas oficinas; en la primera habrá un mercado perteneciente a la cadena Cimex, una licorería, una confitería, los almacenes del edificio y espacios para el servicio de los trabajadores por cuenta propia.
La pretensión es que los servicios y el concepto comercial marquen hitos en Cuba, que devengan referentes para otros centros comerciales del país.
En Cuatro Caminos, el ruido de los equipos de la construcción ha sustituido al de los antiguos pregoneros. Una valla se extiende a lo largo del perímetro; grandes lienzos cubren las paredes.
Las personas pueden ya apreciar el proyecto general, imaginar el futuro de un barrio que ahora mismo presenta grandes problemas constructivos. El mercado debe ser la punta de lanza de un proceso mucho más ambicioso de recuperación y restauración.
Por el momento, se está trabajando. Y se nota.
(Tomado de CubaSi)