Bagdad, 30 dic (RHC) Los mercados iraquíes recuperan sus ventas luego de iniciarse la extracción de petróleo interrumpida por manifestaciones en el sureño campo petrolero de Nasiriya, cuya producción fluctúa entre 80 000 y 85 000 barriles diarios.

Aunque demorará algunos días la regularización total de las operaciones, su reinicio ahora permite el cumplimiento de los compromisos, pese a las protestas iniciadas desde octubre pasado, estimó el Ministerio de Petróleo.

Los manifestantes obligaron el sábado al personal a cortar la electricidad, en una acción sin precedentes, pues aunque antes bloquearon los ingresos a refinerías y puertos, es primera vez que paralizan un campo petrolero.

Las afectaciones registradas por esa causa durante el tiempo en que estuvieron paralizadas las operaciones serán compensadas por producción adicionales de otros campos de Basora, de acuerdo con el gobierno.

Medios de prensa señalan que la extracción puede aún afectarse por las protestas iniciadas el 1 de octubre por inconformes en su mayoría jóvenes que critican la corrupción oficial y exigen cambios del sistema político.

Líderes de los manifestantes argumentaron que las ganancias generadas por la exportación del crudo no benefician las vidas de los ciudadanos normales, sino a las transnacionales y familias que controlan ese sector.

Iraq es, después de Arabia Saudita, el mayor productor de crudo de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, con alrededor de 4,6 millones de barriles diarios, que garantizan más del 95 por ciento del total de ingresos.