La Paz, 28 jul (RHC) El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, destacó que el proceso de paz entre su gobierno y las insurgentes FARC-EP, Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo es producto de una negociación seria y responsable.
En Lima expresó Santos que el diálogo ha ayudado a entender que las diferencias se pueden superar luego de su llegada a esa capital como invitado a la toma de posesión del nuevo presidente peruano, Pedro Pablo Kuczynski.
Al respecto abogó el primer mandatario colombiano por la conciliación entre las partes y aseveró que hacer lo posible para aceptar las diferencias es muy importante para la democracia.
Por otra parte manifestó que su Ejecutivo aspira fortalecer las relaciones con Perú bajo el nuevo gobierno de Kuczynski y precisó que ambos países comparten una riqueza amazónica y trabajan juntos para su protección frente amenazas como el tráfico de drogas.
Mientras el abogado y exvicepresidente Humberto de la Calle afirmó que el venidero plebiscito, concebido para validar los pactos entre el Gobierno y las insurgentes FARC-EP, deberá ser un escenario de reencuentro entre los colombianos.
No sirve un acuerdo firmado en La Habana, entre ambas partes beligerantes, si no es avalado por los ciudadanos, comentó el jefe de la delegación gubernamental en dichas pláticas, con sede en Cuba desde 2012.
El plebiscito deberá ser un momento de reencuentro, no de polarización, insistió el portavoz del Ejecutivo durante un conversatorio con los miembros del Partido Conservador.
Luego de la firma de la paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), el presidente Juan Manuel Santos convocará a la ciudadanía a participar en ese ejercicio democrático con el fin de legitimar todo lo consensuado en la capital cubana.
En su disertación, De la Calle informó que desde ahora los representantes del Gobierno en tales citas emprenderán una gran campaña pedagógica para dar a conocer el contenido de los convenios suscritos.
Los colombianos deberán tomar una decisión a conciencia, verdaderamente informados, dijo.
Luego de haber conciliado posiciones en los temas de reforma rural integral, participación política, combate contra el tráfico ilícito de drogas, víctimas, cese el fuego bilateral y desarme de esos insurgentes, los voceros reunidos en Cuba dilucidan asuntos como el método para seleccionar a los magistrados quienes aplicarán la justicia transicional en la fase posbélica.
Asimismo perfilan los mecanismos para reintegrar a la vida civil a los futuros desmovilizados de las FARC-EP, principal organización rebelde involucrada en la guerra interna.
Única en el continente, la confrontación ha dejado unos ocho millones de víctimas, entre ellas 300 mil muertos.
