La Habana, 1 ene (RHC) El papa Francisco afirmó este domingo en Roma que la orfandad espiritual provocada por la pérdida del sentido de pertenencia es un cáncer que corroe y degrada el alma silenciosamente.
En su homilía durante la celebración eucarística dedicada a la Virgen María y a la Jornada Mundial de la Paz, el Sumo Pontífice dijo que la degradación se produce al considerar "que nadie nos pertenece y no pertenecemos a nadie".
"La pérdida de los lazos que nos unen, típica de nuestra cultura fragmentada y dividida, hace que crezca ese sentimiento de orfandad y, por tanto, de gran vacío y soledad", añadió.
La falta de contacto físico (y no virtual) -indicó- va cauterizando nuestros corazones haciéndolos perder la capacidad de la ternura y del asombro, de la piedad y de la compasión.
Para Francisco, la orfandad espiritual hace olvidar lo que significa ser hijos, nietos, padres, abuelos, amigos, creyentes. Del valor del juego, el canto, la risa, el descanso y la gratuidad.
Expresó que las madres son el antídoto más fuerte ante las tendencias individualistas y egoístas, encierros y apatías.
Una sociedad sin madres -subrayó- sería una sociedad sin piedad que ha dejado lugar sólo al cálculo y a la especulación. Porque las madres, incluso en los peores momentos, saben dar testimonio de la ternura, de la entrega incondicional, de la fuerza de la esperanza.
Al concluir el tradicional rezo dominical del Ángelus, el Sumo Pontífice reiteró su llamado a la no violencia, al celebrarse hoy la Jornada Mundial de la Paz, tradición cincuentenaria iniciada por su antecesor Paulo VI.
Y manifestó su profundo dolor y solidaridad con el pueblo turco con motivo del atentado terrorista efectuado la víspera en una discoteca de Estambul, con un saldo de 39 muertos y decenas de heridos.
Lamentablemente -dijo- la violencia ha golpeado también la pasada noche de parabienes y esperanza, "pido al Señor que apoye a todos los hombres de buena voluntad" enfrentados con valentía al terrorismo y "a esta mancha de sangre que envuelve al mundo con una sombra de miedo y desconcierto".