Washington, 23 ene (PL) La vigilancia persiste hoy en el estado de Georgia, tras el azote de una serie de tormentas y tornados que mataron al menos a 18 personas en territorios sureños de Estados Unidos.
El gobernador de Georgia, Nathan Deal, declaró el estado de emergencia en siete condados especialmente golpeados por la furia atmosférica, con siete muertos en Cook, el distrito más afectado.
"Insto a todos a obrar con cautela y cuidado para garantizar la seguridad y evitar futuras pérdidas de vidas y lesiones", declaró Deal, a propósito de los meteoros que mataron a 14 personas en Georgia y cuatro en Mississippi.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió una alerta de inundaciones en condados como Rome y Calhoun, recomendando a los residentes moverse a terrenos altos, y alertó a los estados de la Florida, Alabama y Carolina del Sur.