Madrid, 8 mar (RHC) El ministro de Asuntos Exteriores de España, Alfonso Dastis, expresó en Madrid el apoyo del gobierno de su país a los esfuerzos por la paz en Colombia.
El titular recordó que en anteriores procesos, España también respaldó los esfuerzos pacificadores en la nación latinoamericana, y lo hizo en el plano político, mediante la cooperación en la Unión Europea, en organismos multilaterales, como Naciones Unidas, y en el desminado.
En un encuentro con Humberto de la Calle, representante del Ejecutivo colombiano en las negociaciones con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia -Ejercito del Pueblo, Datis conoció sobre la marcha del proceso de concentración y de dejación de armas de esa guerrilla, así como la arquitectura normativa para aplicar el Acuerdo de Paz.
A su vez, las partes repasaron el estado de las negociaciones con el grupo insurgente Ejército de Liberación Nacional, que se desarrollan en Quito, Ecuador.
La defensora de derechos humanos Lilia Solano afirmó que las mujeres colombianas deberán asumir el reto de implementar el acuerdo de paz, tras medio siglo de conflicto y contribuir a superar todas las formas de violencia.
El primero de los desafíos es hacer realidad el pacto con las FARC-EP, por eso muchas de nosotras decidimos comprometernos con su aplicación además de luchar por cerrar las brechas salariales entre trabajadores y trabajadoras, impulsar la batalla por una mejor distribución de la tierra en un país con un elevado porcentaje de campesinas, insistió en declaraciones a Prensa Latina.
Según la también dirigente del partido Unión Patriótica otra de las metas es propiciar la reconciliación entre los ciudadanos.
Con la iniciativa Un millón de mujeres por la paz recorremos todas las regiones de nuestra nación con el fin de identificar lideresas y apoyar su rol protagónico en el ámbito territorial, dijo la activista.
Las voces femeninas deben sobresalir por encima de las de los enemigos del proceso pacificador, comentó Solano luego de recordar que pese a los avances conseguidos con las negociaciones de Cuba, hay sectores atados a la agenda de la guerra.
En el propio Congreso de la República tenemos férreos detractores del acuerdo con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) como la bancada del Centro Democrático, encabezada por el expresidente Álvaro Uribe, subrayó.
No obstante -expresó- la resistencia y maniobras de ciertos grupos, muchas comunicadoras, maestras, profesionales del sector de la salud, hemos dicho que "seremos las parteras de la paz".
El pasado 24 de noviembre el presidente Juan Manuel Santos y el líder de las FARC-EP, Timoleón Jiménez, firmaron el tratado definitivo para terminar los enfrentamientos y hostilidades.
Única en el continente la guerra interna ha dejado unos 300 mil muertos, casi siete millones de desplazados de sus lugares de origen y al menos 45 mil desaparecidos. Solano fue una de las promotoras de foro Las mujeres y la paz, celebrado este miércoles en el Parlamento, al que asistieron congresistas, integrantes de movimientos sociales, juristas, así como representantes del cuerpo diplomático acreditado aquí.
Durante el conversatorio, la segunda jefa de la misión de Cuba, Zulán Popa, reiteró la disposición de su pueblo y Gobierno para seguir respaldando los esfuerzos en busca de un escenario de distensión integral para Colombia, aspiración y desvelo de millones de madres, indígenas, políticas, afrodescendientes y labriegas.
De los casi ocho millones de víctimas de la confrontación, más de tres millones son mujeres.