Buenos Aires, 13 mar (RHC) Maestros y trabajadores del sector educacional de la provincia argentina de Buenos Aires protagonizan un nuevo paro de 24 horas mientras los gremios nacionales se alistan para otra media de fuerza similar esta semana.
La situación sigue tensa en el sector sobre todo en esa provincia donde las clases no acaban de arrancar y el Gobierno local y los gremios continúan sin lograr un acuerdo salarial.
Tras el encuentro entre las partes el viernes pasado, durante el cual el Ejecutivo provincial ofreció un aumento de 19 por ciento pagados en tres tramos, el último a cobrar en enero 2018, los maestros bonaerenses llamaron a continuar la lucha y continuar hoy en paro.
"Los seis gremios docentes bonaerenses, en unidad, rechazaron de plano esta nueva propuesta, que sigue siendo totalmente insuficiente y desoye la voz de los maestros que durante toda esta semana se mostraron organizados y decididos en la lucha", apuntó en un comunicado el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires.
El lunes pasado de 50 a 70 mil personas marcharon en las calles de la capital en respaldo a un paro de 48 horas a nivel nacional que retrasó el inicio del ciclo lectivo en 20 de las 23 provincias.
Hace solo tres días los cinco gremios docentes nucleados en la Confederación argentina de Trabajadores de la Educación (Ctera) anunciaron un nuevo paro nacional de cuatro días, dividido en dos partes.
El miércoles harán una jornada de 48 horas a la que se sumaron también los docentes universitarios, y la semana próxima, el 21 y 22 de marzo, habrá paros, movilizaciones, clases públicas y asambleas.
El sector desde hace meses viene reclamando una negociación salarial en busca de elevar el sueldo en un 35 por ciento para tratar de compensar el alto índice de inflación que en 2016 llegó a más de 40 por ciento.
La gran mayoría de los Gobiernos locales propone un 18 por ciento a pagar en cuatro cuotas, atadas a la inflación, lo que se reduce más o menos a 250 pesos (16 dólares) por mes en cada trimestre, dependiendo de la carrera docente.
Los sindicalistas habían adelantado en días recientes la posibilidad de otro paro si no encontraban una respuesta positiva a las justas demandas.
El 15 y 16 de marzo los maestros paralizarán las clases en todo el país, de camino a una gran marcha federal educativa, del 21 al 22 del presente mes.
En un comunicado difundido en su página en internet, la Ctera precisó que retomarán las protestas ante el incumplimiento del Ministerio de Trabajo de convocar a un convenio nacional y frente a los numerosos conflictos, la ausencia de propuestas a una convocatoria en varias provincias y los despidos en el Ministerio de Educación.
Los días 15 y 16, explicaron los organizadores, se realizarán acciones en toda la nación, entre actos, marchas, foros educativos y radiales, "abrazos en las escuelas", entre otras iniciativas.
Asimismo el sindicato anunció que iniciará acciones judiciales contra el ministro de Educación Esteban Bullrich ante el incumplimiento de la Ley de Financiamiento Educativo.
El lunes y martes últimos más de 70 mil personas salieron a las calles de Buenos Aires en una masa compacta que desbordó más de 20 cuadras para exigirle al Ejecutivo poner en marcha esta ley y buscar soluciones a las demandas de los maestros.
Desde hace meses el sector reclama una negociación salarial en busca de elevar el sueldo en un 35 por ciento para tratar de compensar el alto índice de inflación que en 2016 llegó a más de 40 por ciento.
La gran mayoría de los gobiernos locales propone un 18 por ciento a pagar en cuatro cuotas, atadas a la inflación, lo que se reduce más o menos a 250 pesos (16 dólares) por mes en cada trimestre, dependiendo de la carrera docente.
El punto de las diferencias radica en la decisión del Gobierno del presidente Mauricio Macri de dejar en manos de las administraciones provinciales el monto del mínimo salarial, según las posibilidades, mientras los maestros abogan por una negociación salarial a nivel nacional.