El Salvador reclama fin de agresión imperial contra Venezuela

Editado por María Candela
2017-04-19 20:14:43

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San Salvador, 19 abr (RHC-PL) El Salvador se sumó a la movilización mundial de solidaridad con Venezuela, con un concierto gigante en la capitalina plaza Simón Bolívar, para llamar al diálogo y al fin de las agresiones contra el gobierno de Nicolás Maduro.

Los movimientos sociales, estudiantiles y comunitarios advirtieron que seguirán atentos al curso de los acontecimientos en Venezuela, y aseguraron que el pueblo bolivariano no está solo ante las conspiraciones mediáticas, políticas y diplomáticas.

Entre cantos, discursos y proclamas, en ambiente de entusiasmo revolucionario, los salvadoreños expresaron su disposición a apoyar al valiente pueblo de Bolivar y de Hugo Chávez ante las amenazas imperiales promovidas desde Estados Unidos.

Damián Alegría, diputado del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), acusó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, de entregarse a la voluntad de Washington para quebrar a Venezuela.

'Los salvadoreños vemos con orgullo al pueblo venezolano luchar por su dignidad, para impedir que triunfen esa maniobras, y defender el legado de Chávez, que beneficia a todos los pueblos de América y el mundo', enfatizó Alegría.

A su vez, la también legisladora Nidia Díaz insistió en la importancia del diálogo para solucionar las diferencias entre el gobierno venezolano y la oposición, y aseguró que El Salvador aboga por una negociación con mediación del Papa Francisco I.

Mientras, diplomáticos de los países miembros de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) también acudieron al 'Canto de solidaridad y por la Paz', como fue llamada esta iniciativa global convocada por el Foro de Sao Paulo.

El concierto incluyó música, poesía, expresiones artísticas y mucha solidaridad, con los fundadores del conjunto Yolocamba Ita, los grupos Sierra Madre y Las Musas, entre otros, más el apoyo de organizaciones eclesiales de base.

Fue una jornada de alegría y compromiso político, durante la cual fue denunciada la agresión contra el gobierno democráticamente electo de Maduro, en un ambiente festivo y sin violencia: la paz fue, defintivamente, protagonista.



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