Brasilia, 17 may (RHC) La negativa a presentar nuevos testimonios relacionados con el caso que se sigue en contra el expresidente de Brasil, Luis Inacio Lula Da Silva, constituye una persecución política implacable desde el poder judicial, económico y mediático.
Así lo afirmó el miembro de la dirección general del Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Tierra (MST), Roberto Baggio, relativo a la decisión del juez Sergio Moro, encargado de la investigación sobre la operación Lava Jato, de negar a la
Baggio afirmó que la negativa a la defensa y al Ministerio Público Federal (MPF), constituye una maniobra judicial contra el ex mandatario brasileño proveniente de sectores de la prensa y de parte de la burguesía brasileña que está interesada en que la economía del gigante se conecte con intereses norteamericanos.
Recientemente el abogado de Lula, Cristiano Zanin Martins, indicó que la inocencia del ex presidente fue comprobada , y precisó que “no disponen de pruebas de la acusación formulada”.
Ante todo ese ataque sistemático contra Lula Da Silva, Baggio afirmó que el pueblo brasileño prepara nuevas movilizaciones para aumentar la presión contra el accionar de los golpistas en Brasil, en un escenario actual donde la popularidad del líder brasileño aumenta semana a semana.
Baggio concluyó en que “no hay pruebas materiales de que Lula haya cometido algún delito, por tanto la base jurídica es inconsistente”, y aseguró que toda la estrategia jurídica del juez Sergio Moro se basa en intentar condenar al ex mandatario sin base alguna.
“No se puede condenar a una persona sin que haya cometido crimen, el poder judicial no presentó pruebas materiales, y es por eso que movimientos sociales y el pueblo brasileño seguiremos peleando en defensa de Lula y de la democracia”, finalizó.
(Con información de La Radio del Sur)