Madrid, 29 may (RHC) Una amplia mayoría de españoles, el 77 por ciento, desaprueba la gestión del gobierno de Mariano Rajoy frente a la crisis territorial en Cataluña, región que busca separarse de este país europeo, reveló un sondeo.
Ese porcentaje se dispara hasta el 96 por ciento entre los ciudadanos catalanes, indicó una encuesta de la firma Metroscopia publicada por el periódico El País en su edición dominical, resalta Prensa Latinal.
La censura al ejecutivo central es generalizada entre los electores de todas las agrupaciones políticas, incluidos los del conservador Partido Popular (PP) de Rajoy.
Según Metroscopia, las críticas a la forma en que el Palacio de La Moncloa -sede presidencial- abordó el desafío secesionista proceden de todo el electorado, con condenas unánimes de los votantes de los partidos catalanes que impulsan la independencia.
Sin embargo, especialmente llamativa es la valoración del segmento de la población española que simpatiza con el PP, donde un 53 por ciento considera que Rajoy actuó de manera inadecuada ante el diferendo.
Una cifra que crece hasta el 57 por ciento entre quienes respaldan a esta formación en Cataluña, subrayó el estudio.
Los votantes del Partido Socialista Obrero, Unidos Podemos y Ciudadanos -principales fuerzas en el Congreso de los Diputados, en ese orden- también reprochan de forma abrumadora la gestión de La Moncloa ante las pretensiones separatistas de esa comunidad autónoma.
En todos los casos, los porcentajes superan el 75 por ciento, señaló la indagación.
La coincidencia entre lo que piensan los catalanes y el conjunto de españoles se quiebra cuando se pregunta si la manera de salir del laberinto actual es la convocatoria de un referéndum negociado y legal para que Cataluña decida si quiere seguir siendo parte de esta nación.
El 71 por ciento de los preguntados en esa región del noreste, de 7,5 millones de habitantes, es partidario de esta opción, frente a un 26 por ciento que la rechaza.
En el resto de España se invierte drásticamente este porcentaje: un 62 por ciento rechaza la posibilidad de un referendo de autodeterminación, aunque sea pactado, por un 38 por ciento que lo apoya, concluyó la pesquisa.