Moscú, 21 ago (RHC) El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, aseguró este lunes que su gobierno tomará las medidas necesarias tras analizar detenidamente la decisión de Estados Unidos de restringir el proceso de entrega de visas a ciudadanos de ese país.
A través de su página web oficial, la embajada nortearmericana comunicó que el otorgamiento de permisos a no migrantes será suspendido desde el 23 de este mes hasta el primero de septiembre.
Ese procedimiento será retomado a partir de esa fecha, pero solo en Moscú, en tanto los consulados en San Petersburgo, Ekaterimburgo y Vladivostok no realizarán esos trámites hasta nuevo aviso.
En declaraciones a la prensa, Lavrov consideró esa acción como un intento de Washington de causar insatisfacciones en la población rusa y aseguró que la respuesta del Kremlin no afectará a los ciudadanos norteamericanos.
A mediados de julio, Estados Unidos anunció un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, considerado ilegítimo e injustificable.
En respuesta, Moscú informó el bloqueo del uso de propiedades de la embajada estadounidense en ese país a partir del primero de agosto y la demanda de reducir el personal de esa misión para septiembre.
De acuerdo con un comunicado de la Cancillería rusa, Washington debe garantizar una reducción de sus empleados, de tal forma que su número quede en correspondencia con el total de diplomáticos y personal técnico de la embajada rusa en Estados Unidos, es decir, 455.
El Ministerio también advirtió que se reserva el derecho de aplicar otras contramedidas, luego que el 29 de diciembre, la administración de Barack Obama bloqueara las casas de descanso de la embajada rusa en Centreville, Meryland, y Oyster Bay, en Nueva York.
En tanto, el equipo de Donald Trump no dio ninguna respuesta positiva a la demanda de Moscú de devolver las citadas propiedades, bloqueadas a la par del anuncio de expulsión de 35 diplomáticos rusos.
De acuerdo, al presidente del comité de Relaciones Internacionales de la cámara baja rusa, Leonid Slutski, esa decisión del gobierno estadounidense y las relacionadas con el otorgamiento de visados demuestran que la Casa Blanca está dispuesta a continuar obstaculizando las relaciones con esa nación. (Fuente/PL)