Washington, 29 sep (RHC) El senador norteamericano Patrick Leahy consideró que el responsable de los incidentes reportados por diplomáticos de Estados Unidos en Cuba está intentando interrumpir el proceso de normalización entre ambos países.
En un comunicado, subraya Leahy que continúa siendo un misterio para Washington y La Habana la causa de esas afecciones a la salud de varios diplomáticos estadounidenses y sus familiares que residen en la capital cubana y quién está detrás.
Asimismo precisa en el texto el legislador demócrata por el estado de Vermont que en necesario hacer todo lo posible para minimizar los efectos de las medidas de protección en la diplomacia, al referirse a la decisión del Departamento norteamericano de Estado de retirar a más de la mitad de su personal de la Embajada en Cuba.
El senador norteamericano Patrick Leahy manifestó que resulta necesario resolver ese misterio para que el personal de la Embajada del país norteño regrese con la mayor rapidez posible.
El pasado 26 de septiembre, el canciller cubano Bruno Rodríguez, se reunió en Washington con el secretario de Estado, Rex Tillerson, y le transmitió que según los resultados preliminares obtenidos por las autoridades cubanas en su investigación, la cual tuvo en cuenta datos aportados por las estadounidenses, hasta el momento no hay evidencias de las causas y el origen de las afecciones de salud reportadas.
Durante el diálogo, Rodríguez ratificó a Tillerson la importancia de que Estados Unidos coopere de forma efectiva con Cuba para el esclarecimiento de unos hechos de los cuales no existen precedentes en la isla.
Mientras el Grupo de Trabajo bipartidista sobre Cuba en la Cámara de Representantes de Estados Unidos rechazó hoy los llamados a cortar las relaciones diplomáticas y los viajes entre ambos países.
A su juicio, esas exhortaciones de voces contrarias al proceso de normalización como la del senador Marco Rubio, y los esfuerzos de represalias sin identificar a los responsables de afectaciones a la salud reportadas por diplomáticos norteamericanos en La Habana son equivocados.
Tampoco, expuso el grupo en un comunicado, hacen algo para garantizar la seguridad del personal diplomático estadounidense y sus familias.
“Mientras el Departamento de Estado, las fuerzas del orden y las comunidades de inteligencia continúan su investigación, nos alienta la voluntad del Gobierno cubano de servir como socio para resolver este asunto”, sostuvo.
“Una resolución rápida y apolítica está en el mejor interés de ambas naciones y apoyamos la cooperación y el compromiso continuos hasta que se determine la fuente y el motivo de estos ataques”, agregó.