Nairobi, 27 oct (RHC) Un caos generalizado estuvo presente en los comicios de Kenya, caracterizados por una inusual ausencia del candidato opositor, choques que causaron seis muertos y una votación mayoritaria favorable al aspirante por el partido Jubileo y presidente del país, Uhuru Kenyatta.
Los enfrentamientos entre opositores y gubernamentales y las protestas convocados por la opositora coalición Súper Alianza Nacional, liderada por el antes aspirante Raila Odinga, se intensificaron en las últimas horas, mientras la población y observadores extranjeros mantenían sus temores ante una posible masacre.
Los hechos asumían un tono más excepcional en medio del ambiente político ante un proceso electoral con Kenyatta como virtual candidato único ante las pocas posibilidades de los demás contrincantes, en especial por la retirada de Odinga casi un mes antes de la consulta, basado en acusaciones adelantadas de fraude electoral.
El pronóstico de ventaja por Kenyatta, aunque obvio, fue un nuevo elemento para el calentamiento del conflicto, y se basó en datos de la Comisión Electoral Independiente y de Fronteras, tras recibir los resultados de más de 36 000 de los 40 883 colegios electorales.
Las suspicacias sobre un agravamiento de la crisis política generada por el propio proceso electoral se fortalecieron con nuevas preocupaciones ante la posibilidad de que se reediten los choques postelectorales de 2007, que tuvieron un saldo de 1200 muertos.
El componente étnico, influyente en aquella ocasión, conserva su vigencia por el origen de Kenyatta, de la etnia mayoritaria kikuyu, frente a la de Odinga, de la luo, quien calificó estas elecciones de “mascarada” electoral.
La participación de los 19,6 millones de electores en los escrutinios fue de menos del 35 por ciento, escrutadas más del 90 por ciento de las circunscripciones, lo cual desestimó aún más la posible legitimidad del próximo presidente, muchos de cuyos partidarios tradicionales se abstuvieron de votar.
“Al término de esta elección, el país está más dividido e inestable que nunca, publicó el periódico The Nation en un editorial que también cuestiona a Kenyatta y Odinga, quienes “deben entender –asegura- que ya no pueden tener posiciones antagonistas”.
Según distintas fuentes, unas cien personas murieron por la represión policial contra las protestas desde la primera fecha de elecciones del 8 de agosto, cuyos resultados fueron anulados por el Tribunal Supremo, que ordenó fijar esta nueva fecha del 26 de octubre.