Montevideo, 17 nov (RHC) Una multitudinaria marcha desde la Universidad de la República hasta el Obelisco de esta capital abrió las puertas de la Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo, con sede en Uruguay.
El río de banderas con colores e insignias de movimientos sociales, organizaciones sindicales, feministas y ecologistas, y enseñas de países como Brasil, Chile, Venezuela y la nación anfitriona, fluyó a través de la avenida 18 de Julio, la más importante de esta ciudad, reportó Prensa Latina.
Las voces de «Fora Temer», contra el gobernante de Brasil, y «Fuera Macri», con igual clamor contra el Presidente argentino, resultaron recurrentes durante la movilización inaugural del encuentro, centrado en las luchas en defensa de la democracia y contra los acuerdos de libre comercio.
También el enfrentamiento a las transnacionales y el impulso a la integración de los pueblos, piedras angulares de la cita, estuvieron en los llamados de los miles de activistas de unos 20 países presentes en la caminata.
La cita, que culminará mañana, sábado, contemplará paneles relacionados con la lucha de los pueblos, así como los desafíos frente a la ola conservadora y los ataques a la democracia.
La Jornada nació en 2015 en La Habana, durante el Encuentro Hemisférico realizado para conmemorar los diez años de la derrota del Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA), política impulsada por Estados Unidos para consolidar el dominio y la explotación económica de la región.
La Jornada Continental por la Democracia y contra el Neoliberalismo es un encuentro trascendental, declaró a la agencia Prensa Latina la segunda secretaria de la Federación de Mujeres Cubanas, Arelys Santana, al resaltar la necesaria unidad de los pueblos.
Al frente de la delegación cubana, la dirigente femenina advirtió sobre la existencia de una lucha muy fuerte para aplastar la confianza en la izquierda.
En su opinión, resulta muy necesaria la unidad de los pueblos con el objetivo de «enfrentar la lucha que se nos está haciendo en estos momentos para erradicar todo lo que tenga sentido de prosperidad y de orden».
Una vez más, Cuba llega a un encuentro como este en medio de la necesaria formulación de un proyecto de trabajo unido de todos los movimientos sociales de la región, sostuvo.
Para mi país, añadió, se trata de un evento con una importancia extraordinaria, en primer lugar muy cerca de haber tenido una nueva victoria en Naciones Unidas contra el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, y Cuba agradece a todos los pueblos del continente que han apoyado a la Isla.
Estaremos compartiendo con los movimientos sociales que hasta acá lleguen, añadió, para trasladarles nuestras experiencias y seguridad en que no hay otro camino que no sea la unidad de los pueblos para encontrar la victoria de todo lo que aspiramos.