El Cairo, 21 dic (RHC) La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) hizo un llamado en El Cairo de las consecuencias negativas que el fenómeno global del hambre tiene en el Medio Oriente y África del norte, donde más de 40 millones de personas sufren por la falta de alimentos.
Al presentar el informe, el representante regional de la FAO, Abdesalam Ould Ahmed, argumentó cómo en los países en conflicto de Oriente Medio ya hay más personas con hambre que en Sudamérica y el África Subsahariana.
Esa situación, alertó, Abdesalam Ould Ahmed, continúa deteriorándose rápidamente.
De acuerdo con el reporte, en las naciones de la región hay 28,1 millones de personas desnutridas, lo que equivale al 28,2 por ciento de la población total.
La situación más grave se experimenta en Siria y Yemen, naciones donde casi el 50 por ciento de sus habitantes requiere de asistencia alimentaria urgente, agrega el texto.
En esos dos países entre el 70 y el 80 por ciento de la población depende de ayudas humanitarias, mientras en Iraq es de un 30 por ciento, y del 20 en Libia.
La emigración desde las zonas de conflicto, detalla el informe, tiene un impacto negativo también en naciones vecinas.
Países como Líbano, con un millón de refugiados sirios, ha visto incrementada su población real en un 23,1 por ciento.
Para Ould Ahmed debe ser prioritario detener los conflictos, porque sin paz, resaltó, es imposible reducir el hambre.