Brasilia, 9 abr (PL) El líder de la bancada del Partido de los Trabajadores (PT) en la Cámara de Diputados, Paulo Pimenta, reiteró que existe fundada preocupación con la seguridad del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso en Curitiba.
Pimenta externó su inquietud después que la precandidata presidencial del Partido Comunista de Brasil (PCdoB), Manuela D'Ávila, fuera agredida verbalmente tras participar en un acto político en apoyo al ex primer mandatario celebrado en la capital paranaense, donde se mantiene una vigilia denominada Yo soy Lula.
El ataque contra la dirigente comunista, que fue facilitado por los policías, fue premeditado, lo cual torna el episodio en un hecho todavía más grave, subrayó el legislador en declaraciones amplificadas por el diario digital Brasil 247.
Durante todo el tiempo el agresor fue amparado por los policías; entró y salió escoltado, enfatizó.
De acuerdo con la propia publicación, el atacante de la precandidata presidencial fue identificado como Gildevanio Ilso dos Santos Diniz, quien se desempeña como asesor del diputado federal, Eduardo Bolsonaro, del Partido Social Liberal (PSL), en Sao Paulo.
El parlamentario es hijo del también precandidato presidencial de extrema derecha e integrante de la llamada 'bancada de la bala' Jair Bolsonaro (PSL), quien conmemoró a través de las redes sociales la prisión de Lula.
Otros parlamentarios presentes en Curitiba expresaron igualmente su preocupación con la seguridad del líder histórico y fundador del PT, entre ellos el líder petista en el Senado Federal, Lindbergh Farias (PT) y la propia Manuela D´Ávila.
La diputada estadual recordó que mientras Lula era trasladado del aeropuerto de Congonhas, en Sao Paulo, hacia Curitiba fueron grabados dos audios en los cuales un hombre reclamaba al piloto que se llevara a Lula y no lo trajera nunca más y en otro le pedía lanzarlo por la ventanilla del avión.
En seguida, una voz femenina alertó que la frecuencia es grabada y le pidió a la persona se atuviera a la comunicación reglamentada para los vuelos, según relató la propia publicación.
La Fuerza Aérea Brasileña (FAB) confirmó la veracidad de los audios y detalló que fueron registrados en la frecuencia de la Torre Congonhas, en Sao Paulo, y de la Torre Bacacheri, en Curitiba, pero negó la participación en estos hechos de los controladores de vuelo.
Lamentablemente, dijo la FAB, en las grabaciones en cuestión las frecuencias fueron utilizadas de modo inadecuado por algunos usuarios que se valieron del anonimato para contrariar las reglas.
Por su parte, el vicepresidente del PT, Luiz Dulci, sostuvo que 'ese comentario del piloto refleja un clima de intolerancia, de irrespeto a la libertad, al pluralismo político que es característico de la democracia, que la extrema derecha y sectores de los medios de comunicación propagaron en Brasil en el último período'. (Fuente:PL)
