Bruselas, 11 jul (RHC) Una cumbre de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) comenzó con la mira puesta en la seguridad europea y la búsqueda de estrategias comunes entre sus miembros pese a desacuerdos.
'Dejemos a un lado las divisiones internas para concentrarnos en la unidad en aras de proteger a los 29 Estados miembros y cumplir con el mandato de reforzar nuestra defensa colectiva', indicó este miércoles el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, en la inauguración de la cita.
La reunión se desarrolla en un contexto de segmentación en las relaciones entre Estados Unidos y la Unión Europea (UE) debido a presiones del presidente estadounidense, Donald Trump, hacia el bloque militar.
'Washington destina más dinero a la organización bélica para proteger a Europa que las naciones de esa región', publicó ayer Trump en su cuanta de Twitter.
Con anterioridad el presidente estadounidense amenazó con negar la ayuda de su país a los miembros de la OTAN que no aumenten sus contribuciones financieras al presupuesto de la Alianza militar.
Durante esta jornada inicial Trump calificó de morosos a los miembros de la OTAN por incumplir con la Declaración de la Cumbre de Gales, de 2014, en la cual se estableció que en una década los aliados de la organización deben llegar a destinar el dos por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) para financiar la misma.
En abril pasado Stoltenberg solicitó a los países miembros aumentar la contribución financiera con la alianza militar, justificada en una supuesta amenaza rusa y el aumento por Moscú, desde el 2000, al presupuesto destinado a armas convencionales y nucleares.
En criterio de observadores, el llamado del líder de la OTAN a que los aliados cumplan con ese aporte a los gastos obedece a una permanente y creciente presión en tal sentido por parte del gobierno norteamericano, desde que asumió la presidencia Donald Trump.