Moscú, 1 sep (RHC) El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov, reconoció que las sanciones impuestas por Estados Unidos a su país son adversas, pero reiteró la disposición del Kremlin a dialogar sobre la base del respeto mutuo.

En declaraciones a la televisión local, el canciller señaló que las relaciones bilaterales se encuentran en un punto muerto debido a la decisión de Washington de continuar aplicando restricciones a Moscú sin razones que lo justifiquen.

Cuando nuestros socios decidan iniciar conversaciones respetuosas y considerar los intereses de ambos países, estaremos listos, afirmó.

Siempre hay una salida y el punto de no retorno no existe. Esta es tan solo una página triste en la historia estadounidense, añadió.

El lunes pasado entró en vigor un nuevo paquete de sanciones anunciado por la administración de Donald Trump bajo el pretexto de que Rusia es responsable de organizar un ataque químico contra el exagente ruso de inteligencia Serguei Skripal y su hija Yulia.

Las medidas contra este país incluyen la suspensión de proyectos de cooperación técnica, la retirada de fondos para programas militares y la prohibición de la venta de artículos de ese tipo.

Asimismo, prevén la cancelación de préstamos y de licencias para exportar productos y tecnología de uso civil y militar a empresas con participación estatal, entre otras represalias.

En varias ocasiones, el Kremlin ha negado su implicación en el caso Skripal y denunciado la ausencia de pruebas concluyentes, la falta de explicaciones convincentes y la fuerte campaña mediática y política impulsada por Estados Unidos y el Reino Unido.