Moscú, 21 sep (RHC) El jefe de la fuerza aérea israelí, Amikar Norkin, entregó a Rusia detalles del derribo de un avión de exploración radioelectrónica Il-20 sobre el mar Mediterráneo, para tratar de justificar el derribo de un aparato militar ruso mientras Tel Aviv atacaba la provincia siria de Latakia.
Los argumentos de la parte israelí, de acuerdo con el Ejército de ese estado, están referidos más bien a los supuestos intentos de Irán de afianzarse en territorio sirio y de suministrar armamentos estratégicos al movimiento de resistencia islámica Hizbullah, algo que Teherán niega.
De acuerdo con los militares israelíes, en lo adelante es necesario coordinar mejor sus acciones y las de las fuerzas rusas en el futuro.
El pasado miércoles, el presidente ruso, Vladimir Putin, se refirió, en una conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, a las violaciones de la soberanía siria perpetradas por el estado sionista, en las operaciones de su fuerza aérea.
Putin consideró que en el caso del derribo el día 17 de este mes de un avión ruso de exploración radioelectrónica IL-20 para nada se respetaron los acuerdos ruso-israelíes para evitar incidentes peligrosos.
Como resultado, señaló, un avión ruso cayó bajo el fuego de los sistemas antiaéreos sirios, indicó el jefe de Estado, quien llamó a Israel a evitar en lo adelante la repetición de incidentes similares.
El presidente ruso descartó la posibilidad de equiparar el derribo del IL-20, con saldo de 15 militares muertos, con el hecho ocurrido en noviembre de 2015, cuando cazas turcos atacaron un bombardero ruso SU-24 en el espacio aéreo sirio.
Rusia anunció su derecho a responder a las provocaciones de Israel, causante del derribo por la artillería siria de un avión de exploración IL-20, y adjudicó toda la responsabilidad por ese hecho a Tel Aviv.
El ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, informó que le hizo llegar esa posición a su similar israelí, Avigdor Lieberman, durante una conversación telefónica.
Shoigu comentó de esa forma la acción de los pilotos de cazas F-16 sionistas que se parapetaron detrás del avión ruso para llamar sobre ese aparato un fuego amigo de la artillería siria.
La culpa por el derribo del avión y la muerte de 15 militares que llevaba a bordo recae absolutamente sobre Israel, aseguró.
(Prensa Latina)