Brasilia, 29 oct (RHC) La candidata por el Partido de Trabajadores de Brasil, Fátima Bezerra, fue electa como gobernadora del estado de Río Grande do Norte, siendo la única mujer en ocupar este cargo entre los 27 gobiernos regionales brasileños.
La victoria de Fátima Becerra ratifica la hegemonía de su partido en la región nordeste de Brasil, una de las más pobres y de las que más se benefició con las políticas ejecutadas durante el gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva.
El Partido de los Trabajadores de Brasil ganó este domingo en cuatro gobernaciones, todas en los estados del nordeste de la nación suramericana: Bahía, Ceará, Piauí y Río Grande do Norte.
Mientras el Gobierno estadounidense reiteró su propósito de trabajar en los próximos años con el ultraderechista Jair Bolsonaro, presidente electo de Brasil y quien asumirá el cargo el próximo 1 de enero.
De acuerdo con un comunicado de Heather Nauert, vocera del Departamento norteamericano de Estado, su país valora la profunda cooperación con el gigante suramericano.
Ambas naciones, apuntó la portavoz, “comparten una asociación vibrante basada en nuestro compromiso mutuo de promover la seguridad, la democracia, la prosperidad económica y los derechos humanos”.
“Como dos de las democracias y economías más grandes del mundo, estamos trabajando juntos para enfrentar los desafíos globales y regionales más apremiantes del siglo XXI”, agregó Nauert, quien felicitó al candidato del Partido Social Liberal por su elección.
Bolsonaro obtuvo en las urnas electrónicas, de las cuales expresó desconfianza en más de una ocasión, cerca de 57 millones 800 mil votos, el 55 por ciento de los válidos.
De esa manera, el capitán retirado del Ejército superó al aspirante del Partido de los Trabajadores (PT), Fernando Haddad, dueño de poco más de 47 millones de sufragios.
Este lunes, el presidente estadounidense, Donald Trump, escribió en su cuenta personal de la red social Twitter que tuvo anoche una buena conversación telefónica con Bolsonaro.
“Acordamos que Brasil y Estados Unidos trabajarán estrechamente juntos en comercio, sector militar y todo lo demás. Excelente llamada, le deseé felicidades”, precisó el mandatario republicano.
La víspera, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Sarah Sanders, informó en un comunicado acerca de ese diálogo, el cual fue confirmado por el brasileño en un discurso tras conocerse los resultados oficiales de los comicios.
Hace tres días, un grupo de congresistas demócratas llamó al secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, a condenar a Bolsonaro por considerarlo una amenaza para la democracia, los derechos humanos y la legalidad.
“Como debe saber, Bolsonaro elogia regularmente a la antigua dictadura militar de Brasil, ha sido acusado de ofrecer discursos de odio contra las minorías y dijo que no reconocerá los resultados de las elecciones si pierde”, manifestaron los legisladores en la misiva.
Los 18 firmantes del texto advirtieron que el ahora presidente electo se estaba beneficiando de una campaña electoral marcada por la violencia política y un diluvio de noticias falsas e información errónea.
