París, 19 abr (RHC) El gobierno de Francia anunció el despliegue de 60 efectivos policiales para sofocar las protestas de los chalecos amarillos previstas para el fin de semana.
El ministro de Interior, Christophe Castaner, en conferencia de prensa, explicó que el objetivo es asegurar el mantenimiento del orden público y evitar disturbios en el acto 23 de la movilización, para el cual están convocadas acciones en París y en ciudades como Toulouse, Montpellier, Bordeaux, entre otras.
Por su parte, la Prefectura de Policía de París anunció la prohibición de protestas mañana en la zona de la catedral de Notre Dame, por razones de seguridad luego del incendio que asoló el lunes ese emblemático templo católico.
El veto comprende un amplio perímetro: toda la isla de la Cité, donde se encuentra la iglesia, así como las zonas ubicadas cerca de las orillas del río Sena.
Los chalecos amarillos comenzaron la movilización noviembre de 2018 y ya acumulan 22 sábados consecutivos de demostraciones, con el fin de expresar el rechazo a la política gubernamental y demandar cambios a favor de mayor justicia social.
Aunque al principio los manifestantes se oponían al aumento de precios del combustible decretado por el Gobierno, luego las reivindicaciones se ampliaron al incremento de impuestos en general y la pérdida del poder adquisitivo como resultado de la política gubernamental.
Ahora reclaman también reformar la Constitución en aras de una democracia plena y que los ciudadanos tengan la posibilidad de pedir e impulsar la realización de referendos nacionales sobre temas relevantes.