Ramallah, 21 jun (RHC) Al menos 13 palestinos resultaron heridos por munición real o balas recubiertas de goma cuando las fuerzas israelíes atacaron a cientos de manifestantes que participaban en la Gran Marcha del Retorno en la frontera Gaza-Israel.

 El Ministerio de Salud de Palestina precisó que los efectivos militares dispararon varias rondas contra los participantes, quienes  se reunieron en muchos campamentos a lo largo de la frontera.

También detalló que algunos de los lesionados fueron trasladados al hospital y otros atendidos en clínicas de campaña en el lugar.

Por su parte, el comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (Unrwa), Pierre Krahenbuhl, llamó a la comunidad internacional a proporcionar fondos con el fin de mantener el trabajo esencial de esa instancia.

La Unrwa provee alimentos a un millón de refugiados palestinos en la Franja de Gaza, y ofrece servicios de salud y educación a otros cientos de miles en diferentes lugares del Medio Oriente, recordó.

En un encuentro con la prensa con motivo de la próxima conferencia para recaudar fondos, a celebrarse aquí el 25 de junio, Krahenbuhl ofreció detalles de la crisis financiera provocada tras los drásticos recortes de Estados Unidos.

Para mantener abiertas las escuelas, los hospitales y garantizar la distribución de alimentos a esa población refugiada hacen falta unos mil millones 200 mil dólares, y se espera cubrir el monto con las promesas que se hagan la semana próxima, indicó el comisionado.

Si cada donante mantiene la misma cantidad del año anterior, se podrá llegar a esa cifra, dijo, y esto permitirá volver a abrir las escuelas a tiempos, para finales de agosto y principios de septiembre.

Asimismo, agradeció el apoyo que muchos dieron a la Unrwa en 2018, 42 países y organizaciones aumentaron sus donaciones cuando esa agencia de ONU vivió la peor crisis de su historia, luego de los recortes de Estados Unidos.

Todavía no hemos logrado cubrir todas las necesidad, pero me mantengo optimista sobre lo que podemos lograr en la conferencia del 25 de junio, recalcó.

Krahenbuhl también llamó la atención sobre la difícil situación en Gaza debido al bloqueo de Israel, la falta de libertad de movimientos que impone a esa población y el sufrimiento de familias enteras que han sido afectadas por años de conflicto.

La violencia, las muertes de miles de personas y los otros miles de lesionados han ocasionado un fuerte trauma en las personas, y todo ello podría empeorar si se ven privados de los servicios esenciales de la Unrwa, alertó.

Si bien la agencia hace todo lo posible por aliviar la situación de los refugiados palestinos, urge una solución política que ponga fin al sufrimiento de tantos, subrayó.

Pero veo muy pocas señales de que se avance en esa dirección, y mientras tanto, sigue el alto costo humano de la crisis, lamenó el comisionado.

Con respecto a la conferencia de Bahréin, convocada por Estados Unidos con el fin de hablar sobre “soluciones económicas” para los palestinos, Krahenbuhl indicó que no encuentra ningún elemento de tensión entre ese evento y el organizado en ONU.

La Unwra se enfoca en dar asistencia a los refugiados, que las escuelas y los hospitales abran, garantizar alimentos, añadió.

Si bien es una decisión soberana de cada país apoyar o no a la Unrwa, no estoy de acuerdo con las acusaciones lanzadas por Estados Unidos contra los métodos de trabajo y el funcionamiento de esa agencia, observó.

El vocero del secretario general, Stéphane Dujarric, informó que el coordinador de asuntos humanitarios de ONU, Jamie McGoldrick, asistirá a la conferencia de Bahréin e hizo referencia a las palabras del coordinador especial para el proceso de paz en el Medio Oriente, Nickolay Mladenov.

Al hablar de la conferencia de Bahréin, Mladenov señaló la víspera que ningún apoyo económico o humanitario resolverá el conflicto por sí solo, en tanto urgen acciones políticas y sostenibles para la paz.