Bogotá, 11 jul (RHC) La verificación de la implementación del proceso de paz, tras lo pactado en 2016 por el Estado colombiano y la exguerrilla FARC-EP, centra desde hoy la visita de representantes del Consejo de Seguridad de la ONU.
Los miembros del Consejo llegan a este país a pocas horas del asesinato de dos excombatientes de las otrora Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército del Pueblo (FARC-EP), con lo cual suman 136 los exguerrilleros asesinados desde la firma del mencionado acuerdo.
La visita tendrá lugar hasta el 14 de julio con la participación de representantes de los 15 países miembros del Consejo de Seguridad: Alemania, Bélgica, China, Costa de Marfil, Estados Unidos, Francia, Guinea Ecuatorial, Indonesia, Kuwait, Perú, Polonia, Reino Unido, República Dominicana, Rusia y Sudáfrica, refiere Prensa Latina.
También estarán presentes funcionarios de la Secretaría General de las Naciones Unidas, detalló durante una rueda de prensa el canciller colombiano, Carlos Holmes.
Los miembros del Consejo de Seguridad sostendrán reuniones con el presidente colombiano, Iván Duque; ministros, consejeros presidenciales y otros altos funcionarios del Gobierno; congresistas; representantes de organizaciones no gubernamentales.
Asimismo, intercambiarán con miembros de la Jurisdicción Especial para la Paz, de la Comisión de la Verdad y de la Unidad de Búsqueda de Personas Desaparecidas; representantes del ahora partido Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) y de las 26 agencias del Sistema de Naciones Unidas que tienen presencia en este país.
Unido a ello, está prevista la visita de los miembros del Consejo de Seguridad a uno de los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación donde fueron ubicados exguerrilleros de las otrora FARC-EP para apoyarlos en su reinserción a la sociedad.
En relación con el acuerdo de paz, hace menos de un mes la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos manifestó que el actual gobierno colombiano tendrá la responsabilidad histórica de continuar con la implementación plena de lo pactado porque 'no puede haber vuelta atrás'.
(Prensa Latina)