Nueva York, 19 jul (RHC) El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha optado por fundamentar su política y su presidencia en el fomento del odio racial, denuncia un editorial del diario The New York Times.
De acuerdo con el texto, el jefe de la Casa Blanca insiste en que no es un racista, pero eso cada vez es más irrelevante, porque 'independientemente de lo que pueda sentir en sus huesos, es un ávido guerrero de la raza'.
Tal es el significado del canto 'Envíala de vuelta! Envíala de vuelta!', que resonó en su mitin en Greenville, Carolina del Norte, en la noche del miércoles, cuando una arena llena de simpatizantes del presidente rugió esas palabras, señaló el diario.
El periódico recordó que ese grito se escuchó después de que el gobernante republicano dirigió su animosidad contra la representante Ilhan Omar, de Minnesota, quien emigró de Somalia, y a la que él ha acusado de traficar con 'viciosas reglas antisemitas' y de ser una radical de izquierda que simpatiza con Al Qaeda y odia a Estados Unidos, resalta Prensa latina.
Cuando el canto xenófobo lo envolvió, el presidente hizo una pausa para disfrutar del momento. Luego pasó a atacar a otras tres congresistas, todas mujeres de color, que son miembros del llamado 'escuadrón', añadió el artículo.
A medida que creció la reacción contra lo sucedido, incluso con algunas críticas de los republicanos del Congreso, Trump se apresuró a reescribir la escena el jueves. 'No estaba feliz con eso. No estoy de acuerdo con eso', dijo sobre el canto.
Según el Times, esa fue una manipulación audaz, incluso para este presidente. 'Para aquellos interesados en la verdad, el video del episodio está a la distancia de una búsqueda de Google'.
Trump, expresó la publicación, parece ver a la presidencia como un megáfono gigante para alimentar el ánimo racial y étnico, y no solo persigue políticas dirigidas a exacerbar las divisiones, como prohibir a los migrantes de las naciones de mayoría musulmana o construir un muro en la frontera con México.
El gobernante también busca demonizar a quienes se oponen a sus políticas al presentarlos como extremistas peligrosos que quieren destruir a Estados Unidos. En los casos en que sus críticos no son blancos, ya sean congresistas de color o jueces de herencia mexicana, Trump está ansioso por destacar ese hecho, sostuvo el texto.
Para la junta editorial del Times, Trump está tratando de dividir a los estadounidenses en líneas de colores, para evocar una visión en la que los blancos deben luchar contra los no blancos por empleos, riqueza, seguridad y ciudadanía.
Él piensa que este enfoque lo llevará a ganar otros cuatro años en la Casa Blanca. En este punto, ¿importa mucho si está actuando puramente por cinismo político, sin ningún elemento de prejuicio personal? La rabia que está alimentando y el dolor que está causando son demasiado reales. El daño que está haciendo tardará años en deshacerse, concluyó.
(Prensa Latina)