Quito, 13 oct (RHC) El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, aseguró este domingo que revisará la disposición mediante la cual se eliminó el subsidio a varios combustibles, detonante de un paro nacional, en rechazo a la medida neoliberal.
Según explicó en cadena nacional, estudiará los efectos del Decreto 883, que liberó los precios de la gasolina extra y el diésel, y detonó el inicio de las protestas, el pasado 3 de octubre, cuando entró en vigor, lo cual ocasionó el alza inmediata de las tarifas en el transporte público y del precio en alimentos de la canasta básica.
Asimismo, añadió que el análisis también va encaminado a asegurar la llegada de los recursos provenientes de la eliminación del subsidio, al campo, a fin de favorecer el manejo de los mismos por las comunidades.
El anuncio se mantiene alineado a la posición inicial planteada por el jefe de Estado, de no dar marcha atrás en la implementación del decreto, pedido expreso de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, al frente de las movilizaciones.
Sobre el proyecto de reformas laborales que será enviado para la evaluación de la Asamblea Nacional, adelantó que también será revisado, debido a la preocupación manifestada por funcionarios públicos, la reducción de sueldos por concepto de contratos ocasionales renovados y el recorte de vacaciones.
Esas propuestas, consideradas como un paquetazo, también han sido contundentemente rechazadas por los huelguistas, en las calles de numerosas ciudades de la nación andina.
Por otra parte, señaló que propondrá un bono de 20 dólares mensuales, los cuales serán pagados por los empleadores de empresas privadas.
Moreno también dijo: 'en el mismo Proyecto de Ley se incluirá un impuesto para grandes empresas, para que aquellos que más ganan, también sean los que más contribuyan al país'.
Su pronunciamiento público ocurrió horas después de decretar toque de queda y militarización en Quito, donde hoy la policía volvió a reprimir mediante el uso de gases lacrimógenos y perdigones una concentración en el centro capitalino.
La reacción violenta de los efectivos contra mujeres, niños y ancianos, principalmente de comunidades indígenas, desataron incontables mensajes de repudio dentro y fuera de este país, cuyo pueblo, solo pide un gobierno que responda a los intereses de la mayoría y no a presiones del Fondo Monetario Internacional. (Fuente: Prensa Latina).