Naciones Unidas, 21 oct (RHC) El portavoz del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, destacó la necesidad de reducir las tensiones y la violencia en Chile y llamó a una solución pacífica ante los desafíos que enfrenta esa nación.
El vocero se hizo eco de un comunicado del equipo de Naciones Unidas en Chile, que expresa profunda preocupación por los actos de la violencia ocurridos este fin de semana.
Asimismo, lamenta en particular la gran cantidad de personas, entre ellos menores de edad, que resultaron heridos durante las protestas, así como el daño y las pérdidas materiales reportadas.
Con respecto al estado de emergencia decretado por el Gobierno, el sistema de Naciones Unidas recuerda que sus disposiciones deben aplicarse en estricto cumplimiento de las normativas internacionales a las que se ha adherido Chile.
La alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, quien fue presidenta en Chile, manifestó sentirse muy preocupada y triste por la violencia, la destrucción, los muertos y los heridos en su país.
Todos los actos violentos deben ser investigados, dijo y exhortó a los actores políticos y a los representantes de la sociedad civil en Chile a iniciar un diálogo y evitar 'la polarización de palabra o de hechos'.
Según un comunicado difundido por su Oficina, al menos ocho personas han muerto hasta la fecha en el contexto de las protestas, aunque esta cifra podría elevarse hasta 13, señalan distintas fuentes.(Fuente:PL)
Además, de acuerdo con el Instituto Nacional de Derechos Humanos, otras 44 personas han resultado heridas, nueve de ellas gravemente, y 283 habrían sido detenidas en el contexto de las manifestaciones.
'Las autoridades deben actuar en estricta conformidad con los estándares internacionales de derechos humanos. Cualquier aplicación del estado de emergencia debe ser excepcional y en base a la ley. Hay acusaciones inquietantes del uso excesivo de la fuerza por parte de algunos miembros de las fuerzas de seguridad y del Ejército', resaltó Bachelet.
Igualmente, manifestó alarma por las denuncias de que a algunos detenidos se les habría denegado acceso a abogados, tal y como es su derecho, y porque otros fueron maltratados en detención.
El Ministerio del Interior de Chile informó que mil 906 personas han sido detenidas en todo el país durante los últimos días.
La crisis empezó después de que la semana pasada, el presidente chileno Sebastián Piñera decidiera subir el precio de pasaje del metro. Aunque el mandatario anunció la noche del sábado la suspensión del alza de esa tarifa, las protestas continúan.