Damasco, 27 nov (RHC) Familias sirias, víctimas de los conflictos bélicos en el sur y centro de esta nación árabe, reciben ayuda humanitaria enviadas por el gobierno para paliar la situación de desabastecimiento creada en el lugar.
En la sureña provincia de Deraa, se entregaron más de cinco mil canastas de alimentos ofrecidas por el Programa Mundial de Alimentos a las familias más necesitadas.
Según comunicó la organización siria de la Media Luna Roja, decenas de miles de necesitados se beneficiaron en el mes en curso de los convoyes de ayuda enviados a las zonas rurales de Deraa.
Por otro lado, el centro de coordinación ruso en esta nación árabe distribuyó ayuda a unas 400 familias en la ciudad de Palmira, 165 kilómetros al este de la provincia de Homs.
La asistencia incluyó útiles escolares, alimentos y material médico que fue entregada a los pobladores que retornaron a sus hogares tras cuatro años de desplazamiento.
La fuerza aérea del ejército sirio bombardeó centros de refinación de crudo y camiones cisternas empleados por las milicias kurdas para contrabandear el petróleo sirio hacia Turquía.
Milicias kurdas que presumían de su enemistad a Turquía se dedicaban a contrabandear el crudo sirio en complicidad con el régimen turco', declaró un oficial de operaciones citado por la agencia oficial SANA.
Agregó que los bombardeos se efectuaron tras recibir informaciones verificadas sobre las acciones ilegales de robar el crudo en la región siria al-Jazeera (zonas ubicadas al este del río Éufrates).
Según el oficial, quedaron destruidas instalaciones de refinación de crudo y decenas de camiones en la localidad fronteriza de Jarablus en el campo nordeste de la provincia de Alepo.
Las Fuerzas Armadas aplicarán medidas estrictas contra cualquier intento de robo o contrabando de petróleo en el territorio sirio, aseguró el militar.
Siria producía antes del inicio de la guerra en 2011, unos 380 mil barrios de crudo por día, y esta cantidad se redujo a menos de 24 mil barriles debido a los actos terroristas, los bombardeos de EE.UU y su coalición, y el saqueo de las milicias kurdas en complicidad con Washington y Ankara.
EE.UU anunció recientemente que retiró sus tropas de Siria y dejó unos 400 soldados en los campos petroleros de Remelan y al-Omar que contribuyen al 60 por ciento de la producción de petróleo en esta nación árabe.