Atenas, 11 dic (RHC) Las autoridades de las islas griegas de Lesbos, Samos y Chíos, realizaron una jornada de protestas contra los planes del gobierno central de abrir nuevos campamentos de refugiados, con capacidad para 5000 personas.

La declaración conjunta de las alcaldías más afectadas por la crisis migratoria que enfrenta el país, rechaza cualquier estructura adicional a las ya existentes en esos territorios, según la agencia de noticias de Atenas ANA.

Igualmente exigen vigilancia efectiva de las fronteras marítimas y la retirada inmediata y masiva de miles de solicitantes de asilo alojados en esas zonas.

La protesta incluyó el cierre de los servicios municipales, indicó la oficina del gobernador de la región del norte del Mar Egeo, de la que dependen las tres islas.

El alcalde, Constantinos Mutzouris, calificó el hecho como “una primera reacción” e informó que solo en la jornada de ayer martes, 500 personas arribaron a esos territorios.

La administración del primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, anunció en noviembre la sustitución de los campamentos, por estructuras cerradas de mayor capacidad, pero las autoridades locales exigen la reducción del número migrantes en esas islas.

Estamos solos. Primero los europeos han abandonado Grecia y ahora Grecia está abandonando las islas y especialmente Lesbos, afirmó su alcalde Stratis Kitelis.

Por su parte en Chíos, el campamento alberga cerca de seis mil refugiados, cuando su capacidad es para solo mil personas.