Beijing, 20 dic (RHC) China reiteró a Estados Unidos su propuesta de solucionar por fases la desnuclearización en la península coreana, donde las partes implicadas hagan concesiones que también contribuirían a la confianza mutua.

El viceministro de Relaciones Exteriores Luo Zhaohui replanteó el plan para acometer acciones sincronizadas en el delicado proceso, durante sus conversaciones con Stephen Biegun, representante especial norteamericano para la República Popular Democrática de Corea (RPDC).

Abogó porque Washington y Pyongyang reanuden cuanto antes los contactos y los diálogos, caminen en la misma dirección y busquen una salida que conlleve a pasar la página sobre las diferencias.

De acuerdo con la nota, ambos funcionarios analizaron la situación en la península vecina, determinaron mantener la comunicación al respecto y coincidieron en que resolver el tema es de interés común para la comunidad internacional.

Por otro lado, Biegun también conversó con el vicecanciller Le Yucheng acerca de las relaciones sino-estadounidenses y las dificultades que enfrentan para volver a su normal desarrollo.

El funcionario chino recalcó que los problemas yacen en la malinterpretación por parte de Washington de los objetivos de su país de elevar el bienestar y calidad de vida de su población, sin pretensión de competir con nadie.

Según puntualizó, Beijing sigue comprometida con trabajar de conjunto por evitar las confrontaciones y promover la cooperación de ganancia compartida, pero no cederá en la protección de su soberanía, seguridad e intereses de desarrollo.

El enviado especial de Estados Unidos llegó ayer a China como parte de su gira regional que lo llevó a Corea del Sur y a Japón con el foco puesto en los diálogos sobre la desnuclearización de la península.

De hecho desde Seúl invitó a la RPDC a regresar a la mesa de conversaciones sin fecha tope.

Allí enfatizó en que Estados Unidos tiene “el objetivo de cumplir con los compromisos que los dos líderes hicieron durante su histórica cumbre en Singapur”, en referencia a la primera reunión entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong Un, en junio del año pasado en Singapur.

Por su parte, la RPDC considera que Washington conoce sus prioridades y ahora le corresponde a ellos ofrecer las respuestas y soluciones para destrabar los diálogos antes de finalizar el año, plazo límite fijado por Kim.

Esta semana la cancillería norcoreana reveló el aumento de las provocaciones de la Casa Blanca contra su territorio en la ONU y el mes pasado el mediador de Pyongyang ante Washington, Kim Myong Gil, criticó a Estados Unidos por el uso de terceros países para destrabar el diálogo bilateral.