Caracas, 27 feb (RHC) El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, denunció nuevos planes de acciones desestabilizadoras por parte de la burguesía nacional reunidos en partidos de la derecha utilizando la delincuencia organizada.
Durante una reunión para el reimpulso de la Gran Misión Cuadrantes de Paz, en el Palacio de Miraflores (sede del Ejecutivo) el mandatario responsabilizó a sectores de la oposición de financiar a grupos delincuenciales para utilizarlos como punta de lanza contra la seguridad y la paz de la nación.
Aseveró que la derecha activó sus mecanismos de articulación “para poner la delincuencia organizada en función de destruir desde adentro y servir de instrumento para nuevas guarimbas (acciones violentas de calle) y violencia terrorista”.
En tal sentido, Maduro aseguró que durante la reciente visita a Estados Unidos del cabecilla opositor Juan Guaidó –reconocido por Washington como mandatario encargado del país-, se gestó un plan para financiar a las mafias locales y ponerlas al servicio de la desestabilización con fines políticos.
Como parte de las acciones para preservar la seguridad del país, el presidente de Venezuela anunció la creación del Cuerpo Nacional Especial contra el Terrorismo, dirigido por el mayor general Hernán Gil Barrios, el cual asumirá el desmembramiento de los grupos irregulares “que pretendan perturbar la paz y la seguridad”, subrayó.
Asimismo, Maduro destacó el rol de la Gran Misión Cuadrantes de Paz en el cumplimiento de la misión de garantizar la estabilidad y seguridad de la nación sudamericana, a través de varios ejes de acción que incluyen la lucha contra el narcotráfico, la corrupción, la delincuencia organizada y el financiamiento al terrorismo.
Maduro indicó además la importancia de fortalecer los órganos de justicia, las fuerzas de seguridad del Estado, los órganos de inteligencia y contrainteligencia, así como impulsar desde todos los frentes el trabajo de prevención y la educación en cultura y valores.
El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello, resaltó la rebeldía del pueblo, a propósito del aniversario 31 de la primera rebelión popular contra el neoliberalismo.
Durante la movilización para celebrar el denominado Caracazo, Cabello rememoró que aquel 27 de febrero de 1989 los venezolanos salieron a las calles para protestar en contra de las políticas neoliberales del expresidente Carlos Andrés Pérez (1922-2010), dictadas por el gobierno de Estados Unidos a través del Fondo Monetario Internacional.
Destacó a su vez que el pueblo continúa en las calles en apoyo a la Revolución bolivariana y exigió al gobierno de Estados Unidos el cese de sus acciones agresivas contra el país sudamericano.
Por otra parte, aseguró que el gobierno venezolano apoya cualquier mecanismo para la realización de unas elecciones parlamentarias en paz, al referirse al Comité de Postulaciones para elegir la nueva directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE).
En ese sentido, manifestó que no existe un CNE más transparente que el actual y afirmó que los votos no los da el órgano electoral sino el pueblo venezolano.
Con anterioridad, el defensor del Pueblo Alfredo Ruiz manifestó que hace 31 años, durante el Caracazo, Venezuela vivió la mayor violación de los derechos humanos de la historia, lo cual cambió con la llegada de la Revolución bolivariana.
“Actualmente existe una dirección de derechos humanos dentro de todas las instituciones, un compromiso del Estado y una Constitución que tiene como columna vertebral la garantía de tales preceptos', expresó Ruiz.
Con motivo de la fecha, la Fuerza Armada Nacional Bolivariana reafirmó su compromiso de velar por los más genuinos intereses de Venezuela y ratificó la determinación inquebrantable de continuar su lucha por la construcción de una nación libre, independiente y soberana.