“Mineápolis pasó por tres noches de infierno, y luego insistí en que la Guardia Nacional entrara e hiciera su trabajo. Fue como un milagro, todo se detuvo. Nunca olvidaré esa escena”, indicó el gobernante estadounidense durante un evento celebrado en la iglesia Gateway de la ciudad de Dallas, ,exas.
Trump describió la intervención militar como una escena hermosa y comparó la actuación de los militares con “un cuchillo cortando mantequilla”, refiere HispanTV.
Además, confesó que los militares utilizaron gas lacrimógeno y otros objetos contra los manifestantes, al justificar que al fin todo estaba bien: pudieron dispersar la multitud y no se escuchaba demasiado acerca de que ese lugar aún tenía problemas.