Ciudad del Vaticano, 21 junio (RHC) El papa Francisco al concluir hoy el rezo dominical del Ángelus, dedicó un comentario a la protección de los inmigrantes y el medio ambiente y destacó también el papel de los padres.
Al referirse al Día Mundial del Refugiado, efeméride del calendario anual de las Naciones Unidas celebrado la víspera, el sumo pontífice dijo que la crisis provocada por el nuevo coronavirus evidenció la exigencia de asegurar también la debida protección de esas personas para garantizar su dignidad y seguridad.
Los invito a unirse a mí en la oración para un compromiso reiterado y eficaz de todos a favor de la efectiva protección de cada ser humano, en particular de quienes son obligados a escapar por situaciones de grave peligro para ellos o sus familias, apuntó.
Otro aspecto sobre el cual la pandemia nos ha hecho reflexionar, puntualizó Francisco, es la relación hombre-ambiente y añadió que el cierre redujo la contaminación e hizo redescubrir la belleza de muchos lugares libres del tránsito de vehículos y los ruidos.
En ese sentido, el papa advirtió que ahora, con la reanudación de actividades, 'todos debemos ser más responsables en el cuidado de la casa común' y reconoció las múltiples iniciativas en ese sentido surgidas 'desde abajo' en todas partes del mundo.
Por ejemplo, precisó, hoy hay una en Roma dedicada al río Tíber, pero hay muchas en otras partes, exclamó el papa quien manifestó el deseo de que esas acciones contribuyan a la formación de una ciudadanía 'cada vez más consciente de este bien común esencial'.
Por otra parte, el pontífice recordó que en algunos países, como el suyo, se celebra hoy el día dedicado a los padres a quienes aseguró su cercanía y oración al expresar que 'todos sabemos que ser papá no es una tarea fácil'.
Por eso, pidió orar por todos los padres al tiempo que recordó de manera especial 'a nuestros padres que continúan protegiéndonos desde el cielo'. (PL)