Washington, 15 sep (RHC) Joe Biden realiza este martes su primera visita a Florida como candidato presidencial demócrata, en lo que es visto como un esfuerzo por ganar apoyo entre los votantes latinos.
El aspirante a la Casa Blanca, quien se enfrentará en los comicios del próximo 3 de noviembre al actual gobernante del país, el republicano Donald Trump, viajará a Tampa y Kissimmee, dos ciudades del llamado corredor I-4, en referencia a la autopista Interestatal 4, que une el este y el oeste del territorio sureño.
La zona por la que atraviesa esa carretera ha sido estudiada durante décadas por analistas, estrategas y periodistas debido a su influencia en las elecciones presidenciales del país, por considerarse que es un área clave para inclinar la balanza a favor de uno u otro candidato.
Según adelantó el diario Tampa Bay Times, la estancia de Biden en Florida, un estado que otorga 29 votos electorales, comenzará esta tarde con un encuentro con veteranos en el Colegio Comunitario Hillsborough, en Tampa.
La cita busca afianzar la posición del exvicepresidente entre los miembros del servicio, cuando, de acuerdo con el diario, existe una creciente evidencia de que la comunidad militar se está desencantando cada vez más con Trump.
De hecho, en una reciente encuesta realizada entre soldados por el medio Military Times, un 41 por ciento de los entrevistados dijo que votaría por Biden en las próximas elecciones, frente a un 38 por ciento que se inclinó a favor de Trump.
Tras la parada de Tampa, el demócrata marcará el inicio del Mes de la Herencia Hispana con un evento en Kissimmee, donde aproximadamente siete de cada 10 residentes se identifican como hispanos o latinos y el español es el idioma predominante en la mayoría de los hogares.
Esa localidad ubicada cerca de Orlando es considerada el corazón de la diáspora puertorriqueña en Florida, un segmento de votantes que resulta de gran importancia para Biden, cuando las encuestas arrojan que ha perdido un gran terreno frente a Trump entre los electores latinos.
La semana pasada, una sondeo de NBC/Marist mostró al actual ocupante de la Casa Blanca con una ventaja de cuatro puntos porcentuales (50 a 46 por ciento) entre los hispanos de Florida.
Si bien varias fuentes cuestionan ese estudio, ya que el número de entrevistados incluyó principalmente a cubanoamericanos y fue bajo en términos estadísticos, el dato es una señal de alerta para Biden, cuando otras encuestas lo ponen por delante de Trump, pero con menos ventaja que la lograda por la excandidata demócrata Hillary Clinton entre ese grupo en 2016.
Una asesora de Biden, Symone Sanders, reconoció que la campaña del candidato tiene más trabajo por hacer para atraer a un mayor número de votantes latinos.
(Prensa Latina)