La Paz, 12 oct (RHC) La vocera política del Movimiento Al Socialismo (MAS), Marianela Paco, denunció ante la comunidad internacional y el pueblo boliviano que está en curso un segundo golpe a la democracia, para impedir que ese partido vuelva a gobernar.
Paco fundamentó su denuncia en la ausencia total de transparencia en el conteo rápido de votos del Tribunal Supremo Electoral (TSE), el retorno de los veedores de la Organización de Estados Americanos (OEA), la declaratoria de toque de queda por seis días y la custodia de las actas por parte de militares y policías que participaron en el golpe del año pasado.
“A la fecha el TSE no le ha mostrado al pueblo boliviano si el sistema de conteo rápido tiene certificación internacional como la que tenía el sistema de conteo del año pasado; no ha mostrado cuáles son las diferencias que han mejorado este sistema de conteo a diferencia del año pasado; si se muestran los resultados por actas y con las fotografías; si se muestran los resultados por mesa o recinto; no nos han demostrado cómo va a funcionar ese sistema. Por tanto, ahí no hay transparencia”, denunció la vocera.
Añadió: “Nosotros conocemos que los observadores de la OEA son los mismos del año pasado. Y ello es una afrenta contra el pueblo boliviano y un claro sabotaje en curso, nuevamente en contra del retorno a la democracia”.
Asimismo, cuestionó que quienes “le han dado el golpe a la democracia, hoy en día quieren custodiar las actas”, en referencia al acuerdo interinstitucional que firmó Salvador Romero, presidente del TSE, con las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, manteniendo los detalles en reserva.
“Los que han mandado a quemar las actas y los tribunales electorales, nuevamente quieren custodiar nuestros votos, entonces la población esta desguarnecida. Por esa razón yo denuncio ante la comunidad internacional esta falta de transparencia y falta de garantías”, expresó Paco a medios de prensa.
Alertó que se avecina una serie de violaciones a los derechos universales, como los derechos a la organización, al reclamo y a la protesta que tiene el ser humano, al haber declarado, como nunca antes en la historia democrática boliviana, un estado de excepción de seis días antes y después del proceso electoral y en total silencio de Salvador Romero.
“El derecho del pueblo a organizarse a demandar y reclamar está siendo criminalizado, amenazando de vandalismo y supuestamente de violencia y son los intolerantes, los antidemocráticos que están viniendo a arremeter y a intimidar al pueblo boliviano”, reveló Paco.
Otro caso que empaña el proceso electoral limpio y transparente es que el TSE no dio a conocer la lista de veedores internacionales, en especial de la Organización de Estados Americanos, afirmó el MAS.
“Nosotros conocemos que los observadores de la OEA son los mismos del año pasado y ello es una afrenta contra al pueblo boliviano y un claro sabotaje en curso, nuevamente en contra del retorno a la democracia”, dijo.
Aseguró que con estos argumentos se alerta a la comunidad internacional a que se pronuncie y evite que estas personas vuelvan a Bolivia porque fueron ellos los responsables de que se haya arrebatado la democracia, la paz y el desarrollo del país.
Fuente: Telesur