Presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora
La Paz, 16 nov (RHC) El presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, designó este lunes a más oficiales de las Fuerzas Armadas, a ocho días de su asunción y a un año del golpe de Estado que derrocó a Evo Morales.
“Posesionamos al nuevo Mando Militar del Estado Plurinacional de Bolivia, que tiene la gran responsabilidad de devolverle a las FFAA la institucionalidad que establece la Constitución Política del Estado, al servicio del pueblo boliviano. #VamosASalirAdelante
En un acto celebrado en la Casa Grande del Pueblo, sede gubernamental, el mandatario boliviano nombró a los generales de brigada Jaime Alberto Zabala y Miguel Ángel Contreras comandante en jefe de la institución castrense, y jefe de Estado Mayor General, respectivamente.
"Tenemos el reto de devolverle a las Fuerzas Armadas su institucionalidad y el lugar en la sociedad que lamentablemente se utilizó equivocadamente", dijo Arce, haciendo referencia al rol de la institución castrense en el golpe.
Para el mandatario boliviano, es necesario que esa institución castrense retome la confianza perdida y que sus miembros "respeten los procesos democráticos"; además, les encomendó defender la paz social y garantizar la estabilidad del gobierno "elegido por voluntad soberana, en el marco de la Constitución".
A su turno, el flamante alto mando militar Zabala llamó a superar la "inestabilidad política" en el país andino, y pidió "dejar de lado el odio y la intolerancia".
Y en lo que respecta a su esfera, solicitó a la nueva administración "mantener la jerarquía y disciplina en todos los niveles de la institución".
Hace poco más de un mes, las Fuerzas Armadas de Bolivia, todavía bajo el Gobierno de facto de Jeanine Áñez, homenajearon a los militares que hace 53 asesinaron al líder revolucionario Ernesto 'Che' Guevara, y amenazaron de muerte a "cubanos, venezolanos, argentinos o lo que fuere" que supuestamente quieran "imponer por las armas un modelo político y económico".
El 10 de noviembre de 2019, el expresidente Evo Morales se vio obligado a renunciar y posteriormente a abandonar el país, luego de que las Fuerzas Armadas y la Policía pidieran públicamente su dimisión, en medio de una fuerte tensión política, violencia en las calles y acusaciones de fraude electoral.
Fuente: Rusia Today