Buenos Aires, 16 dic (RHC) Los presidentes de los países miembros y asociados del Mercosur se comprometieron a reforzar el proceso de integración regional en el marco del mundo post pandemia, a impulsar acuerdos comerciales justos y equitativos con otras naciones o bloques y a profundizar una alianza comercial, política y social más allá de las diferencias ideológicas que pueda haber entre los gobiernos.
Estos fueron algunos de los puntos principales que ofrecieron en sus discursos y en un comunicado conjunto los presidentes de Argentina, Alberto Fernández; Brasil, Jair Bolsonaro; Paraguay, Mario Abdo Benítez; y Uruguay, Luis Alberto Lacalle Pou, países que forman parte del Mercosur y a los que se unieron los mandatarios de Bolivia, Luis Arce, y Chile, Sebastián Piñera, en calidad de estados asociados, durante la 57 Cumbre que el grupo realizó este miércoles de manera virtual.
Durante la sesión, Lacalle Pou le traspasó la presidencia temporal del bloque a Fernández, quien ejercerá este liderazgo hasta junio de 2021, un periodo en el que el Mercosur cumplirá 30 años de existencia.
A diferencia de la anterior Cumbre del Mercosur, que se realizó en julio pasado en un clima de tensión marcada por los permanentes enfrentamientos entre Argentina y Brasil, en esta ocasión no hubo roce alguno entre los jefes de Estado. Por el contrario, por parte de todos hubo compromisos de fortalecer la relación en beneficio de sus pueblos.
Lacalle reconoció que, durante estos seis meses en que ocupó la presidencia pro tempore, la pandemia impidió alcanzar los avances deseados, pero a cambio sí se ratificó la vocación de pertenencia por parte de los países miembros.
Alberto Fernández advirtió que el Mercosur es el proyecto político regional más importante para Argentina: “Es una política de Estado, por eso quiero compartir el sueño de un Mercosur distinto convertido en nave insignia de desarrollo sustentable, innovación tecnológica e inclusión social. Superar esta pandemia supone que construyamos un continente solidario. Como dice el Papa: nadie se salva solo", afirmó.
También insistió en que se necesita más y mejor Mercosur, no menos, porque el bloque tiene la oportunidad de consolidar una recuperación económica sostenible e inclusiva. "En el mundo de la post pandemia, la integración será ecológica o no será", dijo al aclarar que no es posible pensar en una alianza exitosa sin tomar en cuenta el factor social.
"Es hora de superar la globalización de la indiferencia y construir la universalización de la solidaridad. Lo hemos comprendido en esta calamidad sanitaria. La dimensión del Mercosur trasciende el ámbito económico y comercial de sus comienzos, es herramienta más adecuada para la vida de nuestros pueblos", señaló.
El presidente argentino agregó que, en ese sentido, la incorporación de Bolivia como socio pleno será un enorme logro. Ese país comenzó su proceso de adhesión en 2013, y solo falta el aval del Parlamento brasileño para que termine de concretarse.
Por otra parte, Fernández recordó que el Mercosur exporta más de 1200 millones de dólares en alimentos, y puede convertirse en un actor central en el mundo post pandemia. Para ello, apostó a los acuerdos comerciales internacionales, pero con cautela, preservando las economías locales para no firmar acuerdos con cargas imposibles de cumplir.
Fuente: Rusia Today