El cierre de escuelas y las medidas de restricción agravan la situación en la cual los menores deben trabajar para contribuir a los ingresos familiares. Foto: Archivo/RHC.
Ginebra, 23 ene (RHC) La situación del trabajo infantil empeora por la pandemia de la Covid-19, debido al incremento de la pobreza que revierte el avance en la lucha contra ese flagelo, alertó la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El cierre de escuelas y las medidas de restricción agravan la situación en la cual los menores deben trabajar para contribuir a los ingresos familiares, precisó Guy Ryder, director general de la OIT al referirse a los 152 millones de niños que laboran en el mundo.
Señaló que "desde el inicio de este siglo, casi 100 millones de niños dejaron de trabajar", sin embargo, recordó que los momentos de conflicto y fragilidad como las que vive la humanidad por la pandemia acrecientan un problema que afecta a uno de cada 10 infantes en el mundo.
Actualmente existen 152 millones de pequeños afectados por el trabajo infantil, a pesar de que esta cifra ha disminuido un 38 por ciento en la última década, según datos de la OIT.
Casi la mitad de los casos de trabajo infantil se registra en África (72 millones), seguida de Asia y el Pacífico (62 millones), mientras el 70 por ciento de los menores que laboran lo hacen en el sector agrícola, señalan varias organizaciones internacionales.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) 108 millones de niños y niñas entre cinco y 17 años son identificados como trabajadores de la agricultura, sector considerado como uno de los más peligrosos en términos de muertes relacionadas con el trabajo.
La directora ejecutiva del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Henrietta Fore, indicó que el trabajo infantil se ha exacerbado por el aumento de la pobreza, la debilidad de las leyes de protección y las prácticas culturales en algunos países.
El jueves último fue inaugurado el 2021 como Año Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil, aprobado por la Asamblea General de la ONU en 2019, dentro de las metas propuestas en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que instan a que los gobiernos erradiquen el trabajo infantil en 2025.
Se trata de un llamado a prohibir y eliminar las peores formas de trabajo infantil, en particular, el reclutamiento y la utilización de niños soldados, y a acabar con todas las formas de esa problemática social. (Fuente: Prensa Latina)