Moscú, 9 mar (RHC) Rusia y China colaboran para construir una estación en la superficie o en la órbita de la Luna, según un convenio conjunto firmado recientemente por ambos gobiernos.
La Agencia espacial Roscosmos informó mediante un comunicado, que planea cooperar con la Administración Nacional del Espacio de China (CNSA, por sus siglas en inglés) de cara a erigir una base de investigación lunar, y aseveró que cualquier país que esté interesado, podrá participar en el proyecto de la “estación científica lunar internacional”.
La CNSA y Roscosmos “cooperarán en la creación de la base lunar con acceso abierto a todos los países interesados y socios internacionales”, se recoge en la nota, en la que también se hace hincapié en que Rusia no busca ni la privatización ni la explotación de la Luna, como apuntó, en 2020, el entonces presidente de EE.UU., Donald Trump.
El año pasado, el director general de Roscosmos, Dmitri Rogozin, anunció que Moscú dejaría de participar en el Plan Artemisa de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de EE.UU. (NASA, por sus siglas en inglés), que trataba de retornar al ser humano a la Luna en 2024. El país euroasiático renunció a colaborar porque, alegó, el programa se había convertido en un “gran proyecto público”.
Rusia, el primer país que pudo enviar un hombre al espacio en 1961, está investigando las posibilidades que existen para lanzar una misión tripulada con rumbo a la Luna a partir de 2031. A su vez, Pekín pasó a protagonizar un hito histórico y memorable en diciembre de 2020 al lograr que su sonda Changé-5 aterrizase en la Luna.
El documento de colaboración entre Rusia y China fue firmado por Rogozin y el director de la CNSA, Zhang Kejian, y tiene por meta “fortalecer la interacción en materia de investigaciones científicas, y promover el estudio y uso del espacio con fines pacíficos en provecho de toda la humanidad”.
Fuente: Hispantv