Vacuna Sputnik V . Foto/Notimérica
Moscú, 15 mar (RHC) El Fondo de Inversión Directa de Rusia (RDIF), que se dedica a la distribución y venta de la vacuna Sputnik V, divulgó sobre acuerdos suscritos con España, Italia, Francia y Alemania para lanzar en esos países la producción del fármaco anticovid ruso.
El director general de la institución, Kiril Dmítriev informó que actualmente están negociando con una serie de compañías "para aumentar los volúmenes de producción [de Sputnik V] en la Unión Europea" y señaló que desde el inicio de la lucha contra la pandemia buscaban una "cooperación activa con todos los socios, incluidos los de Europa".
"El Fondo de Inversión Directa de Rusia y sus socios también van a estar preparados para iniciar los envíos [de la vacuna] a aquellos países de la Unión Europea que registren la Sputnik V por su propia iniciativa", agregó Dmítriev.
Por su parte, el portavoz de la Comisión Europea, Stefan De Keersmaecker, ha detallado ante periodistas durante una rueda de prensa en Bruselas que actualmente el organismo no mantiene negociaciones con los representantes de Sputnik V sobre la posible compra de la vacuna.
Por el momento, la vacuna creada por los científicos del centro Gamaleya de Moscú está a la espera de su aprobación por parte de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) para que pueda ser usada en el espacio europeo.
Sin embargo, varios países de Europa ya han aprobado el uso de Sputnik V por su propia cuenta sin esperar al registro colectivo del medicamento por parte de la EMA. Actualmente, la vacuna está registrada en Hungría y Eslovaquia.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. publicó recientemente su informe anual en el que describe el 2020 como "uno de los años más desafiantes en la historia" del país.
El documento augura "el fin de la pandemia" gracias a "la entrega de vacunas seguras y efectivas a través de la Operación Warp Speed", un programa público-privado dedicado a la creación de vacunas y métodos de tratamiento del covid-19.
Asimismo, el informe revela que Washington presionó al Gobierno de Brasil para que no compre la vacuna rusa Sputnik V. Bajo el subtítulo "Combatiendo las influencias malignas en las Américas", el documento explica cómo la Oficina de Asuntos Globales (OGA, por sus siglas en inglés) del Departamento de Salud norteamericano utilizó las relaciones diplomáticas para "mitigar los esfuerzos de los estados, incluidos Cuba, Venezuela y Rusia, que están trabajando para aumentar su influencia en la región en detrimento de la seguridad de EE.UU."
Fuente: Rusia Today