En los hechos está involucrada la exesposa de Bolsonaro
Brasilia, 24 sep (RHC) Una empresa abierta por Ana Cristina Siqueira, exesposa del presidente Jair Bolsonaro, realizó extraños y abundantes retiros de dinero entre 2008 y 2014 que hoy la Fiscalía brasileña encauza hacia posibles desvíos de recursos públicos.
Durante seis calendarios, Siqueira hizo mil 185 saques en efectivo por 1,15 millones de reales (cerca de 217 mil dólares).
Tal retirada de recursos aparece en un informe del Consejo de Control de Actividades Financieras que investiga en la otrora oficina del concejal Carlos Bolsonaro, hijo del mandatario, el presunto esquema para exigir a empleados que depositaran en sus cuentas parte del salario, práctica conocida en Brasil como rachadinha.
Las transacciones podrían constituir una prueba de que las empresas vinculadas a la exmujer del gobernante y madre de su último retoño 'han sido utilizadas para ocultar el desvío de recursos públicos de la trama de la rachadinha en el ayuntamiento', indicó el Ministerio Público de Río de Janeiro (MPRJ).
Por los movimientos sospechosos, el MPRJ incluyó, en la ruptura del secreto en la investigación de las rachadinhas, dos personas vinculadas a la firma Valle Ana Consultoría: Adriana Teixeira Machado, socia minoritaria de Siqueira, con 10 por ciento de la empresa, y Luci Teixeira, su madre.
De acuerdo con los fiscales, 'estos vínculos, asociados al movimiento de dinero en la cuenta de Valle Ana Consultoría, sugieren que Ana Cristina Siqueira Valle haya indicado a familiares de su pareja para que actúen como 'empleados fantasmas', con el fin de permitir el desvío de recursos públicos para su remuneración'.
En agosto, el empleado Marcelo Luiz Nogueira dos Santos, quien trabajó para la familia Bolsonaro durante 14 años, reveló al portal de noticias Metrópoles, que la exesposa del presidente tiene 'cosas en nombre de las naranjas. Si haces las cuentas de sus bienes, no cierra. Aparte de las cosas que tiene a nombre de otros', alegó.
La Fiscalía está convencida de que hay evidencia de que Siqueira controló los nombramientos de los familiares como empleados de la oficina de Carlos Bolsonaro, en la alcaldía de Río, y en la de Flávio Bolsonaro, en la Asamblea Legislativa.
A lo anterior se suma que el relator de la comisión senatorial que investiga la gestión gubernamental ante la Covid-19, Renan Calheiros, afirmó al portal UOL que Bolsonaro padre sí cometió un delito de corrupción en el caso de intento de compra de la vacuna india Covaxin por el Ministerio de Salud.
'Tengo entendido (que el presidente practicó corrupción) y sus huellas están en la llamada telefónica realizada al primer ministro de la India para pedirle una reserva de 20 millones de dosis de la vacuna. Y luego el evidente delito de prevaricación, cuando prometió tomar medidas en relación con la investigación', denunció Calheiros.
(PL)