La percepción de que hay corrupción es, de forma natural, mayor entre un 44 por ciento que considera
el Gobierno malo o pésimo. (Foto:PL)
Brasilia, 23 sep (RHC) El 69 por ciento de los brasileños considera que existe corrupción en el gobierno del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, según la última encuesta del Instituto Datafolha, citada por el portal Brasil 247.
El sitio asegura que en su campaña por la reelección, Bolsonaro, aspirante presidencial del Partido Liberal, intensificó acusaciones mentirosas contra el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, postulante del Partido de los Trabajadores (PT).
Refiere que el exmilitar miente de manera recurrente cuando se refiere a la corrupción.
«Siempre que tiene la oportunidad, como en el discurso de apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas esta semana, Bolsonaro dice que ‘extirpó la corrupción en el país’ e intenta asociar las prácticas a los años del PT en el poder», destaca un informe del diario Folha de Sao Paulo.
Pero los actos de corrupción que involucran al clan Bolsonaro y su gobierno abundaron a lo largo de su mandato.
En el ámbito familiar, aparecen casos como el de las rachadinhas, practicada por uno uno de sus hijos, es decir la transferencia de parte de los salarios de los asesores al parlamentario o secretario a partir de un acuerdo preestablecido o como requisito para la función.
Por su parte en lo administrativo, el ilegal tráfico en el Ministerio de Salud que involucró vacunas y las denuncias de desvío de recursos públicos en la asociación entre el exministro de Educación, Milton Ribeiro, y los pastores Gilmar Santos y Arilton Moura, enviados al exfuncionario a petición de Bolsonaro.
La percepción de que hay corrupción es, de forma natural, mayor entre un 44 por ciento que considera el Gobierno malo o pésimo.
En este segmento, el 93 por ciento afirma que impera el flagelo en la administración del excapitán del Ejército.
Recientemente, Lula afirmó que adoptará nuevas medidas para investigar cualquier acto de corrupción si gana las elecciones de octubre.
Cualquier persona que sea acusada de corrupción sería investigada y sancionada si se demuestra su culpabilidad, prometió en una entrevista con el Jornal Nacional de TV Globo.
Aprovechó la ocasión para denunciar la persecución que sufrió por la desactivada operación judicial Lava Jato que, sin pruebas, lo acusó de corrupción y cumplió 580 días de prisión política.
Esbozó mecanismos creados por los gobiernos del PT (2003-2016) para combatir la corrupción, flagelo que «solo aparece cuando se permite que se investigue».
Recordó que en su administración «creamos el Portal de la Transparencia, Ley de Acceso a la Información, contra el crimen organizado, lavado de dinero, y la CGU (Contraloría General de la Unión) entró en el combate a la corrupción». (Fuente:PL)