Netanyahu en su entrevista televisiva. Foto: Público
Benjamín Netanyahu ha afirmado este domingo que no parará la masacre sobre la Franja de Gaza hasta “lograr nuestra meta de destruir a Hamás”.
Así lo ha defendido en la cadena derechista Channel 14, durante su primera entrevista televisiva en un medio israelí desde el 7 de octubre.
El primer ministro de Israel ha indicado que sí está dispuesto a negociar un acuerdo parcial con la organización islamista para recuperar parte de los rehenes. En respuesta, Hamás ha insistido en que cualquier acuerdo debe incluir “una afirmación clara de alto el fuego permanente y una retirada completa de la Franja de Gaza” como “necesidad inevitable para bloquear los intentos de Netanyahu de evadir, engañar y perpetuar la agresión”.
Sin embargo, el alto el fuego es una condición inaceptable para el mandatario israelí, perseguido por crímenes de guerra por la Corte Penal Internacional. En un comunicado, Hamás ha calificado las declaraciones de Netanyahu como “una clara confirmación de su rechazo a la reciente resolución del Consejo de Seguridad y las propuestas del presidente Biden”.
La resolución, aprobada el 10 de junio, apoyó la propuesta de tregua del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre la que Israel y Hamás negocian estas últimas semanas bajo la mediación de EEUU, Egipto y Catar.
Este borrador de acuerdo estadounidense recoge en su primera fase un alto el fuego temporal durante el que se produciría un intercambio parcial de rehenes –mujeres, ancianos y heridos– entre Palestina e Israel.
Prestar ayuda humanitaria en Gaza ya es “casi imposible”
Las declaraciones de Netanyahu sobre la continuación del genocidio palestino han tenido lugar el mismo día en el que la Unión Europea ha alertado de que la situación en Gaza ha alcanzado “un nuevo punto de inflexión” porque la prestación de ayuda humanitaria dentro de la Franja ya se ha vuelto una misión “casi imposible”.
Así lo han anunciado el alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y el comisario europeo de Gestión de Crisis, Janez Lenarcic. “El tejido mismo de la sociedad civil se está desmoronando. Los civiles hambrientos están recurriendo a medidas desesperadas para acceder a la limitada ayuda que llega en cuentagotas”, han advertido en una declaración conjunta.
Ambos dirigentes han señalado que “las operaciones militares en curso y el colapso de la ley y el orden” han convertido la Franja de Gaza en un lugar “inaceptablemente inseguro” donde se lleva a cabo la cooperación humanitaria. “Las operaciones corren el riesgo de fallar si no se toman medidas”, han sentenciado.
En el comunicado, también han lamentado que la ayuda destinada a los civiles de Gaza “se está acumulando en las fronteras de Egipto y Jordania” y avisaron de que algunos suministros, como los alimentos, caducan y “corren el riesgo de desperdiciarse”.
Borrell y Lenarcic han considerado que “es inútil” enviar ayuda a Gaza a sabiendas que no va a poder entrar y por ello han reclamado un alto al fuego inmediato y la liberación de los rehenes secuestrados por Hamás para dar paso a una acción “concertada” para prestar asistencia humanitaria a los civiles.
Ciudadanos israelíes contra Netanyahu por los rehenes
La Asociación de Familias de Rehenes Israelíes en Gaza ha criticado a Netanyahu porque considera que se ha echado atrás de los términos que el propio Gobierno israelí planteó para un acuerdo para la liberación de los secuestrados.
La asociación considera que poner fin a la guerra en Gaza sin conseguir la vuelta de los rehenes es un “fracaso nacional sin precedentes” y una renuncia a los objetivos declarados de la guerra como tal, según recoge la prensa israelí.
Netanyahu estaría así “abandonando” a “120 secuestrados”, lo que supone incumplir su obligación moral, de Estado, para con sus propios ciudadanos. “No vamos a permitir que el Gobierno eluda su compromiso con respecto a nuestros seres queridos. Netanyahu tiene que traerlos a todos de vuelta”, ha subrayado el grupo. (Fuente: Público y Cubadebate)