Cristina Fernández. (Foto: La Gaceta)
Buenos Aires, 7 oct (RHC) La exmandataria argentina Cristina Fernández agradeció este lunes el respaldo de sus compañeros a su posible nombramiento como presidenta del Partido Justicialista (PJ) y abogó por fortalecer la unidad del peronismo.
Nunca ocupé un lugar sin tener la certeza de estar capacitada para la tarea encomendada; sin miedo ni presiones, señaló la exjefa de Estado en una carta abierta publicada en su perfil en la red social X.
Estoy dispuesta, una vez más, a aceptar el desafío de debatir en unidad. Se necesita dirección y proyecto para construir el mejor peronismo posible en una Argentina que se volvió imposible para la mayoría de sus habitantes, añadió.
Asimismo, resaltó la necesidad de concebir al PJ “como el instrumento que debe dar el primer paso para reagrupar a todas las fuerzas políticas y sociales detrás de un programa de gobierno que devuelva a esta nación, sumida en la crueldad y el odio de los necios, la esperanza y el orgullo de ser argentinos”.
Fernández señaló que nunca vio, en la Argentina contemporánea y democrática, que el país en general y el peronismo en particular vivieran un momento como el actual.
Asimismo, indicó que el mandatario Javier Milei “no sólo vocifera e insulta desde el escenario en forma cada vez más agresiva, violenta y soez a todo aquel que exprese una opinión diferente a la suya, sino que, además, avanza a hachazos sobre jubilados, universidades y hasta hospitales de salud mental”.
La figura del Presidente de la Nación gritando y agraviando genera un clima de violencia generalizada. Todo ello mientras el feroz programa de ajuste desestabiliza a una sociedad que sigue siendo golpeada con tarifas impagables y salarios que no alcanzan (…). Hay una suerte de extraño y peligroso “liderazgo” del caos y la destrucción del que nada bueno puede resultar, apuntó.
En la misiva, la expresidenta hizo un recorrido por la historia del peronismo, con especial hincapié en el período 2001-2015, el cual incluye el mandato de Néstor Kirchner (2003-2007) y los dos ejercidos por ella (2007-2011 y 2011-2015).
Como características de ese tiempo enumeró el desendeudamiento estructural, el pago al Fondo Monetario Internacional, la movilidad social ascendente, la creación de universidades, el desarrollo científico y tecnológico, la recuperación del patrimonio nacional y el aumento del presupuesto educativos, entre otras.
Fernández recordó que en la actualidad el peronismo sólo gobierna cinco de las 23 provincias argentinas, pero “sigue siendo la fuerza con mayor cantidad de diputados y senadores nacionales y ello exige, por comprensión histórica y responsabilidad política, su propia reconstrucción, abordando las nuevas demandas sociales”.
“Está claro que hay que enderezar lo que se torció y ordenar lo que se desordenó. Esto plantea la necesidad de crear un ámbito de discusión y participación que hoy no existe y que su ausencia solo genera confusión y vacío. No tengo dudas de que, en esta etapa, el partido es el lugar más apropiado para desarrollar el continente que genere el contenido y que este, además, tenga dirección y objetivos”, afirmó.
Admito que el desafío es grande y que no basta con los cuadros partidarios; pero también tengo grandes esperanzas. (…) Debemos incorporar a las nuevas generaciones en las secundarias, universidades, sindicatos y movimientos sociales y, desde ahí, recomponer la presencia en las barriadas populares junto a las iglesias, las sociedades de fomento, los clubes de barrio y todas aquellas instituciones organizadas desde la comunidad, dijo. (PL)