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La Habana, 13 (RHC) Las prometidas deportaciones masivas en una segunda presidencia de Donald Trump es tema que sigue hoy en el centro de la opinión pública de Estados Unidos.
El temor a las expulsiones y el impacto de este proceso “arruinarían la economía estadounidense”, advirtió Aaron Reichlin-Melnick, miembro del Consejo Estadounidense de Inmigración, citado en la prensa local.
Según un estudio del Consejo Americano de Inmigración sobre los costos de la deportación masiva concluyó que el gobierno tendría que gastar al menos 88 mil millones de dólares por año con el propósito de ampliar drásticamente su infraestructura para poder deportar a un millón de personas cada año.
De acuerdo con los expertos, si Trump llevara a cabo su promesa, “construir, mantener y reparar casas se volvería más caro, al igual que los comestibles, los restaurantes, los viajes y el cuidado de los niños”.
Mientras un modelo del Instituto Peterson de Economía Internacional indicó que los precios aumentarían alrededor de un nueve por ciento, en tanto la producción y el empleo se desplomarían.
Tom Homan, el próximo zar de la frontera de Trump, anticipó que las deportaciones comenzarán con los inmigrantes indocumentados que, a tono con los estándares de las autoridades estadounidenses, representen una eventual amenaza para la seguridad nacional o pública.
“El presidente Trump ha dejado en claro que priorizaremos las amenazas a la seguridad pública y a la seguridad nacional primero y en eso nos concentraremos”, subrayó a Fox News el pasado 11 de noviembre.
“Hay miles de pandilleros, pandilleros inmigrantes ilegales que vamos a estar buscando. Ahora, voy a decir que, si estás en el país ilegalmente, no deberías sentirte cómodo, absolutamente no. No me sentiré cómodo”, advirtió Homan, quien sentenció en otra entrevista: “Tenemos formas de encontrar gente” y “los arrestarán, los detendrán y los expulsarán”.
Se calcula que uno de cada 12 residentes totales del país y casi uno de cada tres latinos están en riesgo de deportación o separación familiar. (Fuente: Prensa Latina)