Deportaciones de salvadoreños

La Habana, 28 ene (RHC) El temor entre salvadoreños residentes en Estados Unidos a las órdenes antiinmigrantes del presidente Donald Trump, es destacado hoy por medios de prensa.

El diario El Mundo cita al director ejecutivo de El Rescate de Los Ángeles, Salvador Sanabria, quien identificó que las principales preocupaciones de un grupo de salvadoreños y mexicanos fueron qué hacer con sus propiedades y negocios, pero «principalmente cómo administrar la separación familiar».

En su reseña la publicación abordó que el también presidente del Instituto Salvadoreño del Migrante (Insami) sostuvo que hay una «campaña de terror» ante lo cual recomendó a los salvadoreños elaborar un plan de emergencia y conocer sus derechos constitucionales.

La campaña de Trump, consideró Sanabria, es «de terror» porque tiene un discurso «xenofóbico, racista, antinmigrante» y de criminalización de comunidades que trabajan en los Estados Unidos para sostener a sus familias.

Subrayó que la política del mandatario desafía las enmiendas cuarta, quinta y décimo cuarta de la Constitución de Estados Unidos.

Brasileños deportados

Por su parte Brasil llamó al encargado de Negocios de Estados Unidos en esta capital, Gabriel Escobar, para pedir explicaciones sobre el trato a los 88 migrantes deportados durante el fin de semana, confirmaron hoy medios locales.

Según el portal G1, convocar a un representante de otro país para pedir información sobre un tema específico, en la diplomacia, es un gesto que señala preocupación del Gobierno sobre el asunto.

El llamado del Ministerio de Relaciones Exteriores afloró después que los migrantes llegaron a Brasil esposados en un vuelo chárter.

Autoridades pidieron un trato digno y humano de los repatriados.

El uso de esposas en vuelos de deportación siempre ha sido una práctica común en el país norteño, según la Policía Federal (PF), pero la rutina es que se quiten antes de desembarcar.

Sin embargo, en el caso del avión que aterrizó el viernes con 88 brasileños en Manaos, capital del norteño estado de Amazonas, los deportados permanecieron esposados al pisar suelo nacional, hecho considerado degradante e inaceptable por el Gobierno.

En un comunicado oficial, la Administración del mandatario Luiz Inácio Lula da Silva clasificó el episodio como una violación de los tratados firmados entre los dos países y protestó contra el uso indiscriminado de esposas.

Lula discutirá nuevamente este martes la situación de los deportados tras analizar el lunes el tema con el canciller Mauro Vieira.

Colmbianos deportados

Al aeropuerto del Comando Aéreo de Transporte Militar de la capital de Colombia, arribaron hoy dos vuelos que regresaron a su país de origen a 201 colombianos deportados de Estados Unidos, según informó la Cancillería.  

La primera de las aeronaves transportó a 91 connacionales desde El Paso, Texas, mientras que el segundo partió de San Diego, California, con 110 migrantes, añadió la fuente.

Se conoció demás que entre las personas devueltas hay 26 menores, de acuerdo con las declaraciones de la directora del ICBF, Astrid Cáceres.

Esa entidad informó que activará protocolos de atención para garantizar el bienestar de los niños, a los cuales se les brindará apoyo psicológico, social y legal, en un esfuerzo por mitigar el impacto de la deportación y facilitar su reintegración.

Asimismo, trascendió que ninguno de los deportados tiene antecedentes penales ni órdenes de captura en Colombia o Estados Unidos, lo cual contradice las declaraciones del presidente Donald Trump de que se trataría de la devolución de “criminales”.

La Presidencia del país divulgó en un comunicado que en el acompañamiento dado para los dos vuelos se verificó que el procedimiento se cumpliera garantizando los derechos de los connacionales por parte de las autoridades migratorias locales.

A propósito del suceso, el presidente Gustavo Petro escribió en su red social X que su gobierno estructura un plan de crédito productivo, asociativo y barato para el migrante.

“Son colombianos, son libres y dignos y están en su patria donde se les quiere. El migrante no es un delincuente, es un ser humano que quiere trabajar y progresar”, afirmó.

La llegada de los deportados ocurre después de un momento de tensión entre Estados Unidos y Colombia, tras la inadmisión por parte de la nación sudamericana de dos vuelos militares con migrantes por el mal trato conferido a estos.

“Estados Unidos no puede tratar como delincuentes a los migrantes colombianos. Estados Unidos debe establecer un protocolo de tratamiento digno a los migrantes antes que los recibamos nosotros”, escribió el jefe de Estado colombiano en su red social X .

Posteriormente, el presidente Donald Trump aseguró que, en represalia, impondría fuertes aranceles a las importaciones de productos colombianos y sanciones de visas.

Colombia convocó entonces a una cumbre extraordinaria de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para discutir la tensa situación creada con las deportaciones masivas de migrantes latinoamericanos. (Fuente:PL)